Después de unos días de locura en la capital, el Real Madrid va aparcando su crisis sobre el césped, y este sábado ha dado otro paso adelante con un afortunado triunfo contra el Real ValladolidLos pucelanos han merecido más en su visita al Santiago Bernabéu, en la que los locales han resuelto en el tramo final un enfrentamiento que ha acabado con polémica arbitral... Minutos después de haber terminado.

La sorpresa ha llegado con el veredicto de Gil Manzano en una jugada que parece clara desde todos los ángulos posibles, y que el colegiado ha complicado en su redacción de los documentos oficiales para la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). Cuando todos sabían cómo se había encarrilado el encuentro, el extremeño ha optado por apuntar en dirección contraria.

El gol en propia de Kiko Olivas que ha significado el 1-0, el trencilla se lo ha adjudicado a Vinicius Jr en el acta. Es cierto que el brasileño ha sido el autor del disparo, pero su lanzamiento iba claramente fuera y la única duda era si hubiera salido por la línea de fondo o por la lateral, dependiendo del efecto que hubiera tomado al botar sobre el césped.

Para evitar polémicas de este estilo, se asume que un tanto de rebote es del jugador que chuta si su intento iba entre los tres palos, algo que no sucedía de ninguna de las maneras con el madridista. Gracias al árbitro, eso sí, ha podido celebrar la primera diana de su carrera como futbolista 'merengue', una que los seguidores han aplaudido ante la emoción del joven carioca.

Vinicius celebra frente a un Santiago Bernabéu nervioso

Lo que hay que reconocer al carioca, eso sí, es que tiene el don de la oportunidad, porque los suyos lo estaban pasando mal antes de su tiro contra el costado de Olivas, que ha hecho imposible la estirada de Jordi Masip. Poco antes de que el internacional abriera la lata, el Real Valladolid había dado varios sustos e incluso se había estrellado hasta en dos ocasiones con el travesaño, que impidió que el 0-1 luciera en el electrónico.

El Santiago Bernabéu estalló en alegría en una tarde de muchos nervios, en la que advirtió a los jugadores que también son culpables de la mala racha. Julen Lopetegui pagó los platos rotos con un despido hace unos días, pero la afición ha respondido con una pancarta y con pitos en varios tramos del duelo.