David de Gea se marcha del Mundial marcado por una dolorosa estadística

Partía como una de las grandes favoritas, pero tras una fase de grupos algo irregular, la selección española se la pegó en octavos de final del Mundial de Rusia. Los hombres de Fernando Hierro no pudieron con la anfitriona del torneo, y tras un partido con mucho dominio y poco remate acabaron pagando su falta de mordiente en una dolorosa tanda de penaltis.

Está claro que las culpas son comunes y que también faltó algo de fortuna, pero las críticas han señalado a algunos protagonistas y hay algunas estadísticas que también las refuerzan. A pesar de haber hecho, precisamente, autocrítica y haber intentado levantar la situación, las soluciones del vestuario no funcionaron, y hay algunos futbolistas que vuelven a casa especialmente 'tocados'.

Uno de ellos es David de Gea, que no pudo confirmar su calidad como uno de los mejores guardametas del mundo y sale del campeonato retratado por un dato demoledor. Del total de 12 disparos que recibió a lo largo de la competición, 11 acabaron besando las redes, ni más ni menos que el 91,6 por ciento. Demasiado duro para un conjunto otrora sólido en defensa y con un seguro bajo palos.

Su calvario empezó en la primera jornada, con un 'hat-trick' de Cristiano Ronaldo al que no pudo poner remedio. Empezó con un penalti, añadió un error que le dejó demasiado nervioso y cerró el duelo con una falta imparable. Tras ellos llegaron Irán y Marruecos, y sólo en el ajetreado empate contra los africanos llegó la primera y única parada. Después, un penalti contra Rusia y una tanda fatídica. 

España no estuvo a la altura en el Mundial

Además de la preocupación en la portería, otro de los errores que condenaron a España fue su falta de profundidad, un obstáculo del que se ha culpado a centrocampistas, delanteros y también al entrenador. Fernando Hierro fue una solución de emergencia pero tampoco pudo ayudar a los suyos con sus decisiones, también obligado por el papel que le tocó asumir a pocos días del arranque.

El mismo Andrés Iniesta aceptó la responsabilidad y la dirigió a los futbolistas, al mismo tiempo que anunciaba su adiós al combinado nacional: "Los culpables son los jugadores porque somos los que estamos en el campo. A partir de ahí cada uno tiene su responsabilidad. Sería ventajista hablar de que el cese de Lopetegui haya sido fundamental para que hayamos quedado eliminados. Todo tiene su importancia pero al final los que teníamos la pelota somos nosotros".