Fue una de las imágenes del partido, y también de la jornada. Este viernes, Neymar Jr rompió a llorar justo después de que el colegiado del Brasil-Costa Rica (2-0), Björn Kuipers, decretara el final del encuentro en San Petersburgo. El brasileño había remado a más no poder para garantizar la victoria de la 'canarinha', y finalmente consiguió llegar hasta la orilla.
Philippe Coutinho fue quien adelantó a Brasil en el minuto 91, es cierto, pero poco después Neymar Jr logró marcar el gol que recompensó su buen partido. Si ante Suiza apenas se le vio, contra Costa Rica 'Ney' no dejó de intentarlo de todas las maneras posibles. Un remate suyo desde la frontal del área se marchó desviado por poco, y en un contragolpe volvió a disparar desde fuera del área, quedándose sin marcar por centímetros.
Al final, obtuvo la recompensa del gol, después de un partido trabado y lleno de pérdidas de tiempo de los jugadores de Costa Rica, que llegaron a desquiciarle. Neymar se las tuvo con Duarte y otros jugadores costarricenses, recibió una amarilla por dar un puñetazo al balón y además vio cómo, por primera vez en la historia del fútbol, el VAR anulaba un penalti señalado previamente por el árbitro.
Todo ello, teniendo en cuenta además la presión que Neymar arrastraba desde antes del encuentro, con la voluntad -y necesidad personal- de cuajar un buen partido para acallar las críticas que había recibido durante los días anteriores tras su intrascendente actuación ante Suiza.
Por todo esto, Neymar Jr explotó justo después del pitido final. Y empezó a llorar sobre el césped, como si hubiese ganado ya el Mundial de Rusia 2018, o bien como un tenista que acaba de conquistar un Grand Slam. Porque, quizá, para Neymar Jr era muy importante no sólo ganar a Costa Rica, sino además hacerlo siendo uno de los grandes protagonistas.
Neymar Jr se quitó un peso de encima
Si bien es cierto que el gol de Coutinho fue mucho más trascendente que el suyo, y que su compatriota ha recibido ya los dos primeros premios 'MVP' tras los choques disputados por Brasil en el Mundial 2018, Neymar Jr se marchó del césped con buen sabor de boca. Había cumplido, y ahora pondrá el foco en Serbia para intentar destaparse definitivamente sobre el césped ruso.