Hombres importantes como Philippe Coutinho, Jerome Boateng, Ivan Perisic y Thiago Alcántara se quedaron en el banquillo este miércoles, de inicio, para recibir a Olympiacos en la cuarta jornada de la fase de grupos de la Champions League. El Allianz Arena acogió el debut como nuevo técnico bávaro de Hans-Dieter Flick, quien apostó por una combinación de juventud con 'pesos pesados' para doblegar a los griegos (2-0).

El Bayern Múnich se valió de los goles de Robert Lewandowski (69') y Perisic (89'), que entró en la segunda mitad, para sumar tres puntos más que le clasifican matemáticamente para los octavos de final de la Liga de Campeones. En cuanto a Coutinho, no entró en el campo hasta el minuto 89 y no dispuso de tiempo, en este sentido, para hacer valer su calidad.

Hasta ahora 'Cou' había estado jugando en la mejor posición para él, la de enganche con libertad para atacar el área, disparar y dar asistencias a sus compañeros desde el balcón del área. Pero tras recibir elogios por su rápida adaptación, su nivel de rendimiento ha descendido en las últimas semanas hasta relegarle al banquillo, ya en algunos partidos bajo el mando de Kovac y ahora en el primero a las órdenes de Flick.

Con la llegada del técnico alemán se abre un nuevo escenario para Coutinho, que deberá ganarse a pulso los minutos en los entrenamientos y partidos para tener protagonismo. El Bayern Múnich dispone de una plantilla talentosa, con jugadores jóvenes y múltiples posibilidades en la línea de ataque, lo que obligará al brasileño a dar un paso adelante si quiere alargar su estancia en Baviera más allá de la presente campaña.

Si Coutinho no mejora, el Bayern no le comprará

Recordemos que el Bayern tiene una opción de compra de 120 millones de euros a final de temporada, pero difícilmente la ejercerá a no ser que Coutinho explote y empiece a cuajar actuaciones brillantes de manera regular. La pega es que, viendo su rendimiento en los últimos partidos, cada vez se parece más a aquel jugador cabizbajo y gris que salió por la puerta de atrás del Camp Nou.

No hay duda alguna de su talento, pero sí de su capacidad para deslumbrar de manera habitual. Flick intentará reconducir la situación y sacar el máximo provecho de su calidad, pero de momento tirará de pragmatismo y eficacia. Lo que mejor le funcione a corto plazo, será lo que más utilice. Lo primordial para el Bayern, ahora, es recuperar la estabilidad de resultados en la Bundesliga.