Con la cercanía de las elecciones para la nueva junta directiva del FC Barcelona comienza a acrecentarse la intensidad en los discursos y en las acciones por parte de los involucrados. En esta ocasión, el precandidato a la presidencia, Toni Freixa, ha elevado una instancia a la Junta Electoral por situaciones que podrían trastocar la transparencia del proceso, alegando que tiene conocimiento de ellas.

En tal sentido, según recoge 'MD', Freixa ha exhortado a todos los postulados a presentar sus firmas, incluso si no han superado el umbral requerido, de modo que aquellas que puedan estar bajo sospecha sean debidamente comunicadas por vía telefónica, independientemente de que sean o no fraudulentas.

En cuanto a los socios que estamparon sus firmas en apoyo a su propuesta, que ya ha superado la cantidad necesaria para su validación, señala que ahora es la Junta Electoral la que debe solicitar las papeletas a cada uno de ellos. No solo en su caso, sino también en el del resto de precandidatos que no alcanzaron los requerimientos para avanzar a la siguiente instancia del proceso

Asimismo, ha indicado que tanto las firmas nulas como aquellas cuya autenticidad pueda ser discutible, deben ser revisadas por la Junta Electoral en uso de sus atribuciones establecidas en el artículo 48.5 los estatutos. Para ello, será preciso que esta solicite las pruebas, bien sea a cada precandidato o a cada socio, mediante llamadas telefónicas o SMS para corroborar la validez de cada manifestación de voluntad.

Sospecha ante llamadas de última hora

Freixa ha denunciado que a lo largo de los últimos días algunos socios han recibido llamadas en las que se les pide la firma, una situación que pudo ser advertida a través de las redes sociales. De igual manera, se ha referido al caso de Agustí Benedito y sostiene que si alguno de los precandidatos no devuelve al club las rúbricas válidas recolectadas, será imposible verificar si se trata o no de firmas duplicadas.