El entrenador del FC Barcelona, Luis Enrique, compareció este martes en rueda de prensa para analizar el partido que afrontará el Barça este miércoles contra el Athletic de Bilbao (21.15 horas), correspondiente a la vuelta de octavos de final de Copa del Rey 2016-17.

En primer lugar, el asturiano instó a cambiar la dinámica. "Después de los partidos siempre analizamos. En Bilbao acabamos con un resultado desfavorable pero marcar un gol nos permite pensar que podemos dar la vuelta a la elimiantoria. Es un estímulo diferente que en la Liga. Será difícil pero venimos de dos resultados negativos, pero queremos dar la vuelta, en la misma línea de los dos partidos con el resultado injusto", comentó.

Y entendió la decisión de sus jugadores de no asistir a la Gala de entrega de los FIFA The Best 2016. "Como entrenador sólo puedo reforzar su decisión. Hubiera respaldado cualquier decisión, en este caso también. Prevalece lo deportivo por encima de todo, que haya jaleo forma parte del mercado en el que nos movemos", opinó el técnico asturiano del Barça.

"Lo fácil es quejarse y llorar, lo diícil es proteger a tus jugadores"

Se mostró convencido de que el Athletic apretará para intentar marcar en el Camp Nou. "Van a apretar seguro porque es una de sus características y cualidades. La mayoría de partidos contra el Athletic lo hemos solucionado bien. Los partidos ante ellos se definen por la presión alta que nos ponen". Sobre las críticas de Gerard Piqué al arbitraje, no cree que le vayan a perjudicar. "No creo que vaya a perjudicarle. Yo estoy encantado con Piqué futbolista y persona. Vosotros tenéis que estar encantados, tenéis un filón", bromeó con la prensa.

Luis Enrique decidió no quejarse ni extenderse sobre la polémica arbitral. "Creo que la postura del entrenador y del club es intachable, de mostrarse por encima de cualquier situación puntual. Lo fácil es quejarse y llorar, lo diícil es proteger a tus jugadores. Yo no escucho nada, pero el run-run intenta minarte".

El FC Barcelona, plenamente motivado en Copa del Rey

El Barça está encajando esta temporada 2016-17 muchos goles al contragolpe, y es una de las situaciones que hay que mejorar. "Es un juego de errores, todos se equivocan en el pase, los rivales en las transiciones, pero nosotros si pones en la balanza generamos más. Si solo miramos los dos partidos... Si miro solo los árboles tengo el riesgo de no ver el bosque. Sabemos que si cometemos errores hay que presionar bien. Corremos riesgos y lo sabemos", comentó el preparador culé.

Espera que los aficionados del FC Barcelona apoyen al máximo al equipo en el Camp Nou contra el Athletic. "Una eliminatoria de Copa significa una tensión necesaria en el ambiente, será un espectáculo deportivo acorde a la competición. Desde el inicio estamos por debajo solo nos queda atacar. Si hacemos un gol estaremos por encima en la eliminatoria. El culé vendrá a apoyarnos".

El vestuario, calmado pese a las polémicas

Luis Enrique, además, no se mojó sobre la posibilidad de que desde el Comité de Competición se pueda sancionar a Gerard Piqué por sus críticas al arbitraje. "Vamos a esperar. No voy a hablar sobre hipótesis o rumores. Lo que suceda, ya se verá y se analizará", manifestó. Pero le instó a que siga teniendo opinión propia. "Cada uno debe tener su opinión, yo hablo muchas veces con él pero cada uno es libre de opinar, considero que la opinión del club y entrenador deben ser claras. El club ha tomado esa decisión y yo lo comparto. Hay situaciones que dan rabia, pero hay que estar por encima. Hay que reforzar al colectivo arbitral para que se equivoquen lo menos posible".

Y está claro que el FC Barcelona necesita una victoria para animarse deportivamente. "Lo que vendría bien es una victoria, sobretodo porque en los últimos partidos merecimos más. Conviene fijarse en el presente, que es una eliminatoria preciosa contra el Athletic", expresó. Por último, dejó claro que, pese a las polémicas, en el vestuario reina la calma. "En la Ciudad Deportiva tenemos una calma de la repera. El ambiente es maravilloso, todo en sintonía. Debemos seguir mejorando, pero si hay alguien especialista en convivir con este runrún son los jugadores del Barça".