Muchos nombres fueron los que aparecieron como posibles relevos de Ernesto Valverde en el banquillo del FC Barcelona después de que el club catalán negociase sin éxito la incorporación inmediata de Xavi Hernández, que actualmente dirige al Al-Sadd catarí, y de Ronald Koeman, que está al frente de la selección holandesa, una de las favoritas para la Eurocopa del próximo verano.

Pese a la negativa de ambos, el FC Barcelona siguió barajando nombres como posibles sustitutos del Txingurri, apareciendo los de Mauricio Pochettino y Quique Setién con fuerza por el hecho de estar sin equipo. En plena rumorología sobre los futuribles al banquillo culé, apareció en la palestra candidatos un técnico que ya se ha enfrentado al Barça en multitud de ocasiones: Massimiliano Allegri.

El italiano entrenó a la Juventus de Turín desde 2014 hasta este último verano, en el que se despidió de la 'vecchia signora' voluntariamente. Allegri se planteaba tomarse un año sabático aunque, según las informaciones publicadas por el Mundo Deportivo, estuvo especialmente seducido por la oportunidad de entrenar al FC Barcelona si finalmente Valverde no seguía.

Las informaciones no fueron más allá y el italiano se mantuvo durante unas horas como una opción dentro de las múltiples que habría si finalmente Valverde y el FC Barcelona​ no seguían de la mano. Allegri tiene una dilatada experiencia como entrenador en la Serie A italiana, algo que podría haber sido una ventaja si en el Camp Nou se decantasen con él.

En Italia ha dirigido al Sassuolo (2007-08), el Cagliari (2008-10), el Milan (10-14) y la Juventus (14-19). Durante este periodo, ha ganado seis Scudettos, 4 Coppas de Italia y tres Supercopas de Italia. Su plan era volver a los banquillos la próxima temporada, y no finalmente no será el elegido para el banquillo azulgrana, que ocupará Quique Setién.

Un estilo que no se acaba de ver en el Barça

Uno de los temas que ha agobiado al barcelonismo de Ernesto Valverde ha sido el juego poco vistoso que ha practicado el equipo con él al mando. El estilo de Allegri tampoco dista mucho del del Txingurri y destaca por ser resultadista. Habría sido, sin duda, el único punto en contra de la candidatura del italiano que, eso sí, consigue que todos sus equipos sean plenamente competitivos.