Nuevo golpe para el FC Barcelona, que venía de una impresionante racha positiva gracias a los ajustes del técnico Ronald Koeman que, en los últimos partidos, había llevado a los azulgranas a remontar una diferencia de más de 10 puntos con respecto a un Atlético que parecía encaminado sin enemigos hacia el título.

Con lo justo, y con algo de susto sobre el final, los de Zidane supieron aprovechar sus oportunidades para obtener una victoria que los lleva a la cima de la clasificación de manera provisional, además de asegurar la ventaja en los enfrentamientos directos frente al Barça (1-3 y 2-1) y al Atlético (2-0 y 1-1) si terminan igualados en punto.

A falta de ocho jornadas para la culminación del torneo, el Madrid ha dado un golpe sobre la mesa para imponer su presencia en la lucha por revalidar el título liguero conseguido el año pasado. El Barcelona no queda fuera de competencia, pero ya no dependerá de sí mismo para optar al trofeo.

El gol de Mingueza en el segundo tiempo pudo dar alas a los culés, que vieron en el disparo frustrado de Ilaix su última oportunidad de salir favorecidos del choque con un empate que al menos los habría dejado por encima del Madrid, al tiempo que podía alejarlo de los primeros puestos.

 

Llamado de atención a Laporta

Ambos técnicos, con carencias en sus plantillas y golpeados por las lesiones durante todo el año, han demostrado que pueden configurar un equipo competitivo con las piezas que están en sus manos. Pero entre ellos, fue el francés quien hizo valer sus recursos mostrando orden ante la oncena dirigida por el neerlandés.

El resultado puede servir como advertencia a Laporta, que debe acelerar las gestiones para concretar fichajes de cara a la próxima temporada. No solo para volver a pelear hasta el final por todos los torneos, sino también para convencer a Messi de renovar.

El partido ante el Valladolid ya presagiaba algunos de los problemas que presentaba el Barça de Koeman, y ahora es el Real Madrid quien los ha dejado en evidencia al imponerse en su casa. Una derrota dolorosa para loz azulgranas en el apartado psicológico tras llegar con una buena racha y caer justamente con el máximo rival, que también aspira al título.