Para entender la gran mejoría del FC Barcelona en las últimas semanas, hay que tener en cuenta un factor clave: los goles encajados. En los últimos cinco partidos, culminados todos ellos con victoria azulgrana, los de Valverde han anotado 13 goles y Ter Stegen tan sólo ha recibido dos dianas, una contra el Villarreal en LaLiga Santander y otra ante el Inter de Milán en Champions League.

Comparando esta estadística a la de los cinco primeros partidos de la campaña 2019-20, cuando el guardameta alemán encajó nueve goles en esa primera tanda de choques, la diferencia queda clara. El FC Barcelona ha sabido poner cerrojo a su portería y parar la sangría de goles que estaba recibiendo en los dos primeros meses de la temporada, cosa que le ha permitido recuperar la confianza también en otros aspectos del juego.

La solidez atrás ha permitido que el equipo disponga de más posesión de balón y se despliegue mejor en el frente de ataque, jugando con un mayor orden pero sin caer en la horizontalidad. Al Barça le generan menos oportunides de peligro y, por contra, los culés disponen de más ocasiones de gol. El efecto acordeón ha beneficiado al Barça en cuanto a resultados, y estos resultados sirven para dar mayor confianza a los jugadores.

Se trata de una rueda positiva que ha colocado al FC Barcelona en plena línea ascendente, sin que nadie se atreva a poner techo a los culés. La derrota sufrida contra el Granada en Los Cármenes (2-0) fue esencial para que el equipo, después del duro golpe anímico, hiciera autocrítica y se centrara en cicatrizar sus heridas. En los siguientes partidos siguió sufriendo, especialmente ante Villarreal e Inter de Milán, pero en las dos últimas semanas el combinado azulgrana ha dado un salto cualitativo. Se ha mantenido la portería a cero ante Getafe, Sevilla y Eibar, manteniendo intacta la pólvora arriba.

La reacción, curiosamente, ha llegado con el FC Barcelona diezmado en defensa. Jordi Alba estuvo algunas semanas fuera de combate por lesión, Junior Firpo despertó dudas antes de lesionarse también, y tanto Lenglet como Piqué se han perdido un partido cada uno por sanción. Sergi Roberto, lateral derecho titular frente al Eibar, ha sido el último en irse a la enfermería.

Una mayor aportación del centro del campo

Pese a los contratiempos el FC Barcelona ha sabido mejorar sus prestaciones atrás, gracias también a una mayor aportación de los jugadores del centro del campo. Busquets está cada vez más entonado tras un inicio de temporada irregular, mientras que De Jong y Arthur se han asentado como titulares indiscutibles con un rendimiento excelente en las últimas semanas. Poco a poco, la maquinaria azulgrana se ha ido engrasando y ya rinde a velocidad de crucero.