Jorge Jesús, técnico del Benfica, dijo hace algunas semanas que no veía al Barcelona capaz de vencer al Bayern Múnich en la “final” que se juega en Champions. El destino y sus giros, ahora el técnico vive una incertidumbre real en su club por los malos resultados recientes, sin conocer las posibilidades reales de que sea destituido y eso, en vísperas del duelo ante el Dinamo, ahora beneficia al Barcelona.

El Benfica es hasta el momento el club que mayor provecho le ha sacado al Barcelona en esta fase de grupos de Champions tras la victoria 3-0 en Portugal y luego un empate sin goles en Camp Nou, con cuatro puntos que lo mantienen vivo en la competición y le permite llegar al duelo contra el Dinamo con posibilidades de clasificar.

Pero caer ante el Sporting y que su situación actual no sea la más positiva ni en liga ni en Europa, obliga a la directiva a ver con recelo el desempeño del entrenador y por ende dar un ultimátum, esperando que en primer lugar surta efecto en lo deportivo, en segundo y consecuencia, salir de esta mala racha.

El condicionante pasa por vencer al Dinamo y eso es factible para el Benfica, que sabe bien que incluso con esos tres puntos puede quedar fuera de la competición en caso de que el Barcelona logre derrotar al Bayern Múnich este miércoles, por lo que Jorge Jesús debe poner toda la carne en el asador en su próximo encuentro.

Si las cosas se tuercen para el cuadro portugués y caen ante el Dinamo, la destitución es casi un hecho, aunque si consiguen la victoria y el Barcelona logra el milagro ante los alemanes, el entrenador podrá seguir al frente del club lisboeta y dirigir en la Europa League, competición en la que quedarían.

Muchas buenas noticias

En los últimos días las noticias en relación al duelo entre Barcelona y Bayern no han hecho más que acrecentar las esperanzas del conjunto catalán, que ven como en el conjunto germano se acumulan las bajas y ahora, en el Benfica, se genera un cataclismo que podría favorecerlos incluso con una derrota.