El gran momento de la noche lo protagonizaron Lionel Messi y Ronald Koeman, en la banda, tras la victoria del equipo ante la Juventus. Entrenador y jugador, después de saludarse y felicitarse, se abrazaron exteriorizando su felicidad y alegría por el encuentro realizado. Por fin, el Barça venció y convenció, y lo hizo después de perder el Clásico, ante el Real Madrid.

Los dos líderes del vestuario blaugrana son ganadores natos. Esa muestra de respeto mutuo hace evidente el compromiso de ambos y la intención de retornar el prestigio que este equipo se había labrado en la máxima competición europea. Desde luego, la imagen da pie a la esperanza del aficionado culé, y más, después del juego que se desplegó, en la noche del miércoles.

"Mi relación con Leo Messi nunca ha sido complicada. Hemos hablado claramente en la reunión que hemos tenido y cuando Leo ha vuelto, ha hecho todo para que ganemos partidos. Lo único que le he dicho es que hay que sentenciar antes", desveló el técnico holandés sobre su charla después del cruce, en rueda de prensa.

También habló del gran partido que su equipo realizó, destacando su superioridad ante un equipo como la Juventus: "Hemos sido superiores, sobre todo con nuestro juego. El conjunto ha demostrado muchísima personalidad contra un equipo fuerte en Europa", confesó. El entrenador neerlandés es consciente de que, con la ayuda de Messi, es capaz de ganarlo todo.

Lionel Messi, en su salsa

Lionel Messi vive, en este momento, su momento más feliz desde que tomó la decisión de marchar del FC Barcelona el pasado verano. Sea como sea, no lo consiguió y puede que, teniendo en cuenta la dimisión de Josep Maria Bartomeu, el argentino se replantee la opción de seguir defendiendo el escudo del Barça unos cuantos años más.

La Champions League es la competición que más desea el argentino. Las últimas exhibiciones lamentables del equipo culé en la competición fueron uno de los motivos por los que el '10' decidió que quería irse. Por otro lado, sabe que, con partidos como el disputado contra la Juventus, con dominio absoluto de la posesión, ocasiones y goles, puede conseguir levantar la orejuda.