La política de fichajes del Barça, un riesgo para Ansu Fati y Riqui Puig

Desde hace algunas temporadas, y viendo el bajón de rendimiento progresivo de algunas piezas clave del equipo, el FC Barcelona ha iniciado un proceso de rejuvenecimiento de la plantilla a base de talonario en el mercado de fichajes. Se han fichado a algunos de los mejores jugadores del mundo, como Frenkie de Jong y Antoine Griezmann, además de otras jóvenes promesas como Dembélé, Junior Firpo, Lenglet, Semedo, Arthur y el malogrado Coutinho, quien se convirtió en el fichaje más caro de la historia del club y ha acabado saliendo por la puerta de atrás.

Con el gran objetivo de reducir el protagonismo de sus pesos pesados y aumentar la savia nueva sin bajar el nivel competitivo, el FC Barcelona ha buscado en el 'mercatto' lo que hace unos años le vino desde La Masia. Los Messi, Busquets, Piqué, Pedro, Sergi Roberto; y yendo más hacia atrás los Xavi, Valdés, Iniesta y Puyol triunfaron en el primer equipo porque alguien apostó por ellos y les dio minutos.

Cierto es que igualmente se siguieron fichando a jugadores de gran talento como Ronaldinho, Deco o Eto'o, pero siempre en un equilibrio que permitió el desarrollo de los que han sido algunos de los jugadores más importantes en la historia del FC Barcelona.

Ahora, es posible que la política deportiva de la junta de Bartomeu esté entorpeciendo el ascenso de jóvenes promesas que ya han demostrado, pese a su poco protagonismo, que a la larga podrían convertirse en jugadores importantes para el proyecto azulgrana. Los dos casos más llamativos son los de Riqui Puig y Ansu Fati, talentos que están entre las grandes joyas del fútbol europeo.

El joven centrocampista sigue jugando en el Barça B -donde le asedian a duras entradas en Segunda B- al no tener espacio en la plantilla del primer equipo, sobre explotada de centrocampistas con Busquets, Arturo Vidal, Arthur, Frenkie de Jong, Carles Aleñá y Sergi Roberto. Aleñá, de hecho, es otra joven promesa que se ha visto relegada al ostracismo, y que esta temporada apenas está entrando en las convocatorias.

Ansu Fati y Carles Pérez, difícil encaje en la delantera

El otro caso que llama la atención es el de Ansu Fati, quien fue la gran revelación del principio de temporada con goles y asistencias estratosféricos, y que lleva un mes sin jugar después de que se hayan recuperado de sus lesiones Messi, Suárez y Dembélé. Podría tener minutos el próximo martes contra el Valladolid, pero cada vez es más complicado encontrarle hueco en las alineaciones.

En este cupo también entra Carles Pérez, otro joven atacante que busca oportunidades en el primer equipo y cuya aportación es más que aprovechable, aunque es posible que a la larga tenga que buscarse una cesión o un traspaso con opción de recompra para así tener protagonismo y jugar cada fin de semana. El Barça, en definitiva, encuentra problemas para asentar a sus jóvenes valores en el primer equipo. ¿O es que simplemente no se asientan porque su quinta no es tan buena como la de Messi, Piqué y Busquets en su día? Se abre el debate.