En las últimas horas ha estallado un nuevo caso de tensión interna en el FC Barcelona. En esta ocasión ha sido en las redes sociales, por unas cuentas que el club azulgrana, presuntamente, habría financiado con la intención de erosionar la imagen de algunos de sus jugadores, de ex futbolistas y de posibles rivales de la junta directiva en las futuras elecciones.

En el FC Barcelona se apresuraron a negar rotundamente las informaciones desveladas por el programa 'Què t'hi jugues' de la Cadena SER, asegurando que el club blaugrana ha tenido siempre la intención de proteger a sus jugadores y no de perjudicarles, porque son patrimonio del club. Además, el propio Bartomeu volvió a dar explicaciones la entrega del XIV Premio Internacional de Periodismo Manuel Vázquez Montalbán.

La cuestión es que la polémica generada por la noticia ha llevado a Josep Maria Bartomeu a convocar este martes una reunión para tranquilizar a los jugadores​ que se hayan podido ver implicados. En dicha reunión, según las informaciones publicadas por Mundo Deportivo, han acudido los capitanes Leo Messi, Sergio Busquets, Gerard Piqué y Sergi Roberto.

Dicho medio de comunicación afirma que Bartomeu ha dado las explicaciones pertinentes -negar la contratación de una empresa externa para difundir mensajes difamatorios- a los capitanes de la plantilla, que las han aceptado en un encuentro en el que ha habido coordialidad en todo momento. Las sensaciones habrían sido positivas y, posteriormente, el presidente culé se habría reunido también con Quique Setién.

Preocupación de la hinchada

Pese a que la reunión entre presidente y capitanes ha dejado sensaciones positivas, la afición culé está cada vez más crispada con las múltiples informaciones que han manchado el buen nombre del FC Barcelona en los últimos meses y años. Eso, unido a unos atisbos de crisis deportiva cada vez más evidentes, hacen que la junta de Bartomeu penda de un hilo.

Más allá de las cábalas de futuro, en cualquier caso, en las oficinas del Camp Nou se han centrado en el presente y en solucionar los problemas que han aparecido en las últimas horas. La reunión que Bartomeu ha mantenido con los representantes de la plantilla ha servido para limar asperezas tras unas semanas de roces constantes entre ambas partes. El objetivo sigue siendo que los resultados deportivos no se resientan.