Antony 'machacó' a Raphinha en su particular duelo

El pasado año, cuando se empezó a acercar el verano, el FC Barcelona entendió que debía construir una plantilla competitiva durante el siguiente mercado si quería volver a ser un equipo competitivo, sobre todo en Europa. Los culés venían de no superar la fase de grupos de la Champions League por primera vez en dos décadas y aquello hizo que el club se concentrara en hacer una reconstrucción.

Una posición que por aquellos meses de marzo o abril de 2022 parecía una necesidad importante era la del extremo derecho. La renovación de Ousmane Dembélé estaba totalmente detenida, Leo Messi se había marchado al PSG y las llegadas de Ferran Torres y Adama Traoré en invierno no parecían suficientes para un sector en el que el Barça había sostenido su ataque durante muchos años gracias a la presencia del argentino, y también de Dani Alves como lateral.

La dirección deportiva comenzó su trabajo y llegó a la conclusión de un perfil muy puntual: zurdo, rápido, habilidoso. Dentro de eso, Antony y Raphinha fueron dos nombres que destacaron rápidamente. Finalmente el segundo de ellos fue el elegido para mover ficha, mientras que el ahora extremo del Manchester United quedó relegado por entender que aún estaba muy 'verde' para el máximo nivel.

Antony venía de su mejor temporada en el Ajax, pero esos 22-23 años parecían que aún necesitaban cosas por trabajar, y el Barça buscaba un jugador mucho más hecho. Raphinha ofrecía un 'paquete' mucho más completo y la relación del Barça con su agente, Deco, permitió que el acuerdo entre ambas partes se cerrara rápidamente e incluso se mantuviera cuando el Chelsea quiso llevarse al jugador.

Uno demostró su valor

Ahora, casi un año después de que Raphinha llegara al Camp Nou, y Antony a Old Trafford, el destino los puso a los dos en el mismo campo para enfrentarse, y el que había quedado segundo, ahora fue el ganador. El jugador de 23 años entró en el segundo tiempo y dejó 45 minutos de gran nivel, como todo el United, y además anotó un gran gol que a fin de cuentas terminaría siendo la diferencia en la eliminatoria.

Aunque es cierto que el equipo inglés pagó más de 90 millones, mientras el Barça se quedó por debajo de la línea de los 60 'kilos', Antony demostró que sí estaba preparado para grandes noches y que ese perfil de extremo peligroso que buscaba Xavi y Mateu Alemany, lo entiende a la perfección. El curso terminará, seguramente, con Raphinha sin haber convencido, y con la posibilidad de perder con su compatriota ese lugar de titular en la selección brasileña, una que tendrá en verano un nuevo entrenador.