El cambio de ciclo no se ha completado, todavía quedan viejas glorias en el vestuario del FC Barcelona pero poco a poco, gracias a su política de fichajes, la tendencia está cambiando. El aficionado culé estaba acostumbrado a ver sobre el terreno de juego a jugadores ya formados en los que en algunos casos estaban afrontando ya sus últimas temporadas.

En la temporada 2016/2017 ya se intentó rejuvenecer la plantilla con 6 fichajes de menos de 22 años (André Gomes, Umtiti, Paco Alcácer, Lucas Digne, Denis Suárez y Alen Halilovic) pero el proyecto no terminó de funcionar y hoy en día, solo 4 temporadas después, sólo queda Samuel Umtiti en el vestuario.

Este año se ha apostado de nuevo por jóvenes promesas para poder recuperar el trono del fútbol siendo Ansu Fati la máxima expresión de esta necesaria idea, pero una lesión en el menisco de la rodilla izquierda lo ha dejado 4 meses fuera del verde. Ahora la jovial batuta la ha de recoger alguno de sus compañeros, como por ejemplo Pedri, futura promesa del fútbol español que ha demostrado tener lo necesario para triunfar en este deporte, pero se ha de tener más paciencia con el de Tegueste ya que sus 17 años indican que no se le tiene que presionar tanto

Con Trincao pasa algo similar, es de futuro pero quizá es el que más necesite una cesión para poder crecer fuera de este entorno. Por ahora no está brillando como se le pide y un cambio de aires puede ayudarle. En la medular también hay futuro pero en este caso más consagrado, con un Frenkie De Jong que poco a poco se está aclimatando al entorno blaugrana, también podrían brillar Carles Aleñá y Riqui Puig, pero por ahora, Koeman no está contando con ellos. En defensa hay dos nuevas perlas, Sergiño Dest y Ronald Araújo; ambos en los pocos minutos que han disputado han generado expectación.

Todos ellos no superan los 22 años, por lo que se atisba un buen futuro para la parroquia azulgrana. El problema viene con la exigencia que necesita este club, mientras entre la pelota y se levanten títulos, el río estará calmado, pero si llegan momentos complicados, este grupo con gente importante por formarse no deja claro que pueda soportar la presión mediática.

De ahí la gran incertidumbre: ¿En este mercado invernal por quién apostarán? ¿Más futuro talento o mejor jugadores consagrados para equilibrar el equipo? Sin junta directiva, sin presidente y con una comisión externa encargada de la funcionalidad y operativa del club... ¿Continuarán con la política de fichajes como hasta ahora o decidirán esperar al nuevo presidente?

La plantilla más joven de la historia del club

El Barça B tiene esta temporada la plantilla más joven de la historia del filial con 19,8 años de media, cosa que sin duda es una apuesta evidente por la promoción de los jugadores formados en La Masia para que, en los próximos años, puedan tener oportunidades con el primer equipo.