De todos los nombres que el FC Barcelona tiene apuntados en la agenda, el de Kai Havertz es sin lugar a dudas uno de los que más gustan. El joven centrocampista germano lleva dos temporadas deslumbrando en la Bundesliga, y tanto el Barça como otros grandes clubes de Europa le han echado el ojo de cara al próximo verano, en lo que se prevé que sea uno de los 'culebrones' de 2020.
El Barça sigue a Havertz desde hace dos años y volvió a espiarle este pasado miércoles contra el Atlético de Madrid, tal y como ha hecho en otros partidos de la presente campaña. Sus cualides técnicas, visión de juego, gol y magia con el balón en los pies atraen al Barça, pero hay un factor que echa hacia atrás a los emisarios culés: sus carencias en el trabajo defensivo.
Havertz no ha asimilado aún en el Bayer Leverkusen los mecanismos defensivos y de presión de balón que sí existen en el FC Barcelona, aunque cierto es que algunos jugadores como Leo Messi están exentos de ellos en determinadas fases del juego. El Barça, en cualquier caso, se fija en Frenkie de Jong como el ejemplo de centrocampista que desea fichar en el futuro, y a Havertz le cuesta mucho menos correr hacia adelante que hacia atrás.
En este sentido, si Havertz no mejora dicha faceta con el paso de los meses y no acaba cumpliendo con el perfil exacto que necesita el equipo, el FC Barcelona apostará por otro de sus objetivos en la lista, como podría ser Fabián Ruiz. Desde el Camp Nou desean a un centrocampista brillante, claro está, pero que tenga la solidaridad en el trabajo de presión y las transiciones ataque-defensa que tiene De Jong.
De lo contrario, en el FC Barcelona creen que se correría el riesgo de fichar a un nuevo Coutinho. Es decir, a un jugador de gran talento pero que no es capaz de ofrecer un rendimiento regular durante los noventa minutos, y que no se entrega al máximo en las labores defensivas para ayudar a que el equipo recupere el balón cuanto antes tras pérdida en campo contrario.
Havertz es una opción, pero no una prioridad
Havertz no deja de ser una opción más, y el FC Barcelona seguirá 'espiando' sus actuaciones con detenimiento en los próximos meses. Por ahora, eso sí, el Bayern Múnich está por delante en la lista de pretendientes, y en tierras catalanas no pagarán más de 100 millones de euros a no ser que estén completamente seguros de que es un fichaje necesario.
Los precedentes con Coutinho, Griezmann y Dembélé no han salido demasiado bien, al menos por ahora. El brasileño está cedido en el Bayern y los dos franceses no acaban de explotar con la camiseta azulgrana. Mientras tanto, Ansu Fati se sigue ganando la confianza de Valverde y el cariño de la afición del Camp Nou. Es una prueba más de que, al final, los millones no tienen por qué significar nada.