El FC Barcelona se encuentra, prácticamente, deshojando la margarita para definir quién será el fichaje estrella de la próxima temporada. Los blaugrana, que viven una situación económica muy complicada que se ha agravado por el coronavirus, tienen como principal objetivo a Erling Haaland, pero también suenan Memphis Depay y Sergio 'El Kun' Agüero para llegar al Camp Nou. 

De momento, según informa 'Fichajes.com', en Can Barça hay disparidad de opiniones para elegir al jugador que reforzará el equipo. No es un secreto para nadie que Joan Laporta quiere fichar a Erling Haaland y que ha movido los primeros cables para acercarse a su traspaso. El máximo mandatrio azulgrana, de hecho, consiguió una reunión con el padre del jugador y Mino Raiola, su agente, para hacerles saber de las intenciones del club. 

En Can Barça son positivos con la llegada de Haaland, pero no es tan sencillo y de allí nace la 'pelea' interna en el club. El noruego, en principio, estaría tasado en unos 180 millones de euros, pero la cifra podría reducirse hasta los 150 'kilos' por la insistencia del jugador de salir del club en este verano. El monto, aunque es considerable, de momento no es asumible para los blaugrana. 

Allí entran en acción Memphis Depay y Sergio Agüero, que también llevan tiempo sonando para el Barça. Ronald Koeman, entrenador culé, continúa insistiendo en la incorporación de su compatriota y confía en que tiene las características necesarias para triunfar en el cuadro azulgrana. Además, el neerlandés llegaría de manera gratuita porque termina contrato con el Olympique Lyon. 

En la misma condición llegaría Agüero, desde el Manchester City. Un sector de la dirección deportiva del Barça cree que el argentino sería el candidato ideal para reforzar al equipo y una razón 'extra' para que Leo Messi se quede en el club hasta retirarse. Lo cierto es que el jugador estaría interesado y hasta podría bajarse su sueldo para llegar al Camp Nou.

Indecisión en Can Barça

Lo único cierto es que los tres no pueden llegar al FC Barcelona. El club, de momento, no sería capaz de cubrir los tres salarios, que van a ser muy elevados. Por otra parte, la llegada de algún delantero supondría una revolución en el planteamiento de Ronald Koeman y habrían jugadores claves sacrificados.