Con unos rizos llamativos que ya destacaban en el filial del FC Barcelona, Xavi Simons ya se ha convertido en un ídolo de masas. Este producto mediático no tardó en llamar la atención de Nike y de las grandes agencias de representación, por lo que a la postre aterrizó Mino Raiola en la vida de este centrocampista nacido en Ámsterdam (es internacional con las inferiores de Holanda), pero criado al calor de La Masía culé.

El 'Fenómeno Xavi Simons' comenzó a peligrar tras la llegada del agente italiano, y pronto apareció el Paris Saint-Germain para acabar el cuento de hadas del Barça. Así, con 16 años, los cantos de sirena llegados desde el Parque de los Príncipes terminaron por convencer al jovencísimo futbolista.

La oferta económica ofrecida por el cuadro galo era poderosa, pero la del club azulgrana, según publicó la prensa catalana, se acercó (alrededor de un millón de euros al año). Sin embargo, el sueño de Simons era recalar en el primer equipo lo más pronto posible. Y ese factor, en París, se lo prometían antes que en Barcelona.

Estando en el PSG, pasaría directamente al equipo Sub-19 y, en el curso pasado ya logró tachar el debut con el primer equipo de su lista de tareas personal en el camino hacia el estrellato. Fue el 10 de febrero cuando el joven jugador sustituía a Draxler en partido copero contra el Caen. 12 minutos a los que siguió un minuto más contra el Estrasburgo, ya en la Ligue 1.

Ahora, con el PSG inmerso en una pretemporada cargada de jóvenes promesas, al menos hasta que los futbolistas internacionales regresen de sus vacaciones, Simons alza la voz y está haciendo suyo el verano con una pretemporada de primer nivel.

Una pretemporada de élite

Suma dos partidos de pretemporada, donde ha anotado un par de tantos y repartió una asistencia. Parece que a Mauricio Pochettino le está convenciendo su disposición. En el primero de los partidos ingresó al campo en la segunda mitad, pero tuvo tiempo de asistir a Fadiga en el tercero y cerrar la goleada él mismo.

Como premio a su actuación, el técnico argentino le concedió la titularidad en el segundo amistoso, haciendo pareja con Gueye en la sala de máquinas. Con 1-1 en el marcador, recibió entre líneas para tocar de primeras, de tacón, hacia Gharbi, otra de las grandes perlas de la cantera (un gol y una asistencia a sus 17 años en la pretemporada), que filtró un pase a la espalda de la defensa. La velocidad y la definición del ex jugador del Barça hicieron el resto.