El Barça también trabaja en la rebaja salarial de Busquets

El primer equipo del FC Barcelona ha retomado los entrenamientos en la Ciudad Deportiva con el fin de preparar el compromiso de este sábado frente a los Pumas de la UNAM en el marco del Trofeo Joan Gamper. Los catalanes esperan tener gran parte de su plantilla confeccionada, con las nuevas incorporaciones totalmente adaptadas y los descartes rumbo a otros destinos.

Sin embargo, la dirección deportiva no ha cesado su trabajo por cerrar todas las carpetas importantes que siguen abiertas. Una de ellas es la inscripciones de los fichajes, ya que la masa salarial del plantel es elevada y el club necesita moldearla para que todos estén dentro de la lista. Es por ello que la 'operación salida' ha sido tan importante en estos últimos días, siendo los movimientos de Clément Lenglet, Francisco Trincao, Óscar Mingueza, Riqui Puig y Neto Murara algunos de ellos.

La directiva está atenta a los casos de Samuel Umtiti y Martin Braithwaite, y tienen sobre la mesa la opción de rescindirles sus contratos. No obstante, otra de las alternativas que maneja el Barça es la reducción en los salarios de los capitanes, siendo Sergio Busquets uno de los señalados. Así lo ha desvelado una información de 'Mundo Deportivo', que afirma que la cúpula azulgrana se habría reunido con el centrocampista para definir su situación

Ya unos meses atrás trascendían los reportajes de que el Barcelona habría pedido al capitán reducir sus emolumentos, aunque todo quedó en 'stand by' y solamente se habló con su representante sobre la economía de la entidad. Ahora, después de entreno de este miércoles, el de Badía mantuvo una 'cumbre' con Mateu Alemany y Jordi Cruyff para acercar posturas y acordar una rebaja que facilitaría la inscripción de los nuevos fichajes.

La última 'palanca', a la expectativa

Los del Spotify Camp Nou esperan su primer partido liguero ante el Rayo Vallecano con la incertidumbre de que la cuarta 'palanca' de la directiva sea suficiente para registrar a toda la plantilla. Aquí radica la importancia de que el club tenga definida su situación con el 'fair play' financiero lo antes posible, para que Xavi conozca si puede o no trabajar con todo el grupo en la semana previa al compromiso. LaLiga todavía no ha dicho su veredicto, por lo que todo se mantiene a la expectativa.