Ousmane Dembélé ha vuelto a los titulares y no por un hecho positivo. El extremo francés, que estará de baja por cuatro meses a consecuencia de una desinserción en el tendón del bíceps de la rodilla derecha, ha sido acusado de ser racista después de que se filtrara un vídeo que publicó en su cuenta personal de Snapchat en el que hacía comentarios fuera de lugar contra unos operarios de un hotel, que eran asiáticos, mientras ellos le ayudaban a él y Antoine Griezmann a configurar la televisión.

El el vídeo, filmado por el 'Mosquito', se escuchó al jugador del FC Barcelona referirse de forma despectiva hacia los trabajadores, causando completa indignación a los usuarios de las redes sociales, que no han tardado en criticar los comentarios innecesarios de Dembélé durante la concentración de Francia para la Eurocopa de este verano, en la que aparentemente compartió habitación con Griezmann. 

Lo cierto es que en el vídeo que se ha filtrado se ve al 'Principito' en primer plano y se escucha, entre risas, a Dembélé decirle a Griezmann que "todas estas caras feas, solo para que puedas jugar PES, ¿no te da vergüenza?", añadiendo que "¿Qué tipo de lenguaje es este? ¿Estás tecnológicamente avanzado en tu país o no?", se escuchó antes de que cortara él mismo la grabación. 

De polémica en polémica...

Con una nueva polémica en su historial, el ex jugador del Dortmund sigue en el ojo del huracán por su estado físico (lesionado, hasta noviembre) y la renovación pendiente con el Barça. Su contrato vence en el verano de 2022 y, aunque se ha planteado que el conjunto azulgrana quiere extender su permanencia en el Camp Nou, ha sido el jugador y su entorno quienes han dado largas al asunto. 

Con su baja y la complicada situación financiera por la que atraviesa el Barça, también existe la posibilidad de que el jugador sea puesto en el mercado de fichajes porque los culés necesitan hacer caja y liberar la masa salarial, que es extremadamente elevada en la actualidad. De momento, no han existido avances y el 'caso Dembélé' se presenta como uno de los tantos culebrones que el Barcelona tendrá en esta ventana de transferencias de verano.