Comienza a cocerse un Balón de Oro
La noche mágica que necesitaba Neymar Júnior en el Barça
Publicación:9/03/2017 - 03:35h
Actualización:9/03/2017 - 14:28h
Por primer vez en un partido de máximo nivel Neymar Júnior no dudó en ejercer de líder con Leo Messi sobre el campo. Con tres hombres encima del diez, "Ney" asumió su rol, lideró a su equipo ante el PSG dejando dos goles y una asistencia mágica
Era el día marcado por todos para aparecer y los grandes, como Neymar Júnior, aparecen. Así se forjan los cracks y así comienzan a dejar claro que pueden llegar a ser el líder de un conjunto histórico como es este FC Barcelona. Con Leo Messi desconectado por la trampa táctica de Unai Emery, que le coló a dos e incluso tres defensas que no le dejaban maniobrar, la táctica era clara: balones a Neymar.
Y el brasileño respondió liderando a los suyos desde el primer momento, intentándolo todo y forzando un penalti en el primer tiempo que el colegiado no concedió. El que sí concedió fue el que ponía el virtual tres a cero en el luminoso, también provocado por el mago carioca. Claramente Meunier se tiraba a por el once y se lo llevaba.
El gol de Cavani acababa con muchas esperanzas culés. Tantas que incluso algún que otro soci abandonó el estadio pasada la hora de partido. Una lástima pues los que se quedaron vivieron el recital de ese hombre nacido en Sao Paolo hace ya 25 años.
Primero anotó el cuarto gol tras una falta espectacular. En la esquina del área, y sin a penas ángulo, soltó un derechazo a la escuadra de Kevin Trapp. Si ese gol no hubiera entrado en el 84' ahora no estarían leyendo esto. Pero lo hizo, recogió el esférico y se lo llevó al círculo central, semblante serio.
La noche perfecta de Neymar en el Barça
Insistieron los suyo y tuvieron su recompensa con un penalti sobre Luis Suárez. Leo Messi, en ese momento ya capitán del equipo tras la salida de Iniesta, le cedió el testigo a "Ney". Un testigo que deja a las claras que el rosarino ve en él a su alumno más aventajado. Con esa responsabilidad, Neymar anotó el quinto y volvió a repetir el ritual. Balón recogido, al círculo central, semblante serio y aplausos al Camp Nou para que siguiera creyendo.
Y por si no fuera poca su excelsa actuación, el hombre que tiene todos los números de ser el que desbanque algún día a Cristiano Ronaldo y a Leo Messi como primer Balón de Oro tras ellos, daría la asistencia del gol histórico de Sergi Roberto. Aparecía en la banda derecha, la que no es la suya, caracoleaba a 35 metros de la puerta para poner un centro perfecto. Ese balón que sobrepasó a todo defensa viviente hasta conectar con la bota derecha del de Reus. Balón adentro e historia cerrada.
La noche perfecta y mágica que Neymar Júnior necesitaba en Can Barça. Noche perfecta para creerse y hacer creer que será el futuro líder del equipo.
