Fue surreal la amonestación, ridícula el acta arbitral y ahora nos quedamos sin palabras tras la decisión del Comité de Competición de mantenerle la amarilla a Leo Messi tras el Sevilla-FC Barcelona. No hay nadie que comprenda ninguna de las tres mencionadas acciones que originó un Jaime Latre, colegiado del encuentro, al mostrarle la tarjeta amarilla al rosarino por supuestamente perder tiempo.

Desde el Comité se ha hecho caso omiso a las reclamaciones presentadas por el Barça y se mantiene una cartulina que a día de hoy nadie entiende. Leo Messi fue golpeado por detrás en una falta que incluso le rompió su bota derecha. El jugador, inestable por lo sucedido, le enseñó al árbitro el estado de su "arma", lo que éste entendió como pérdida de tiempo. Vamos, un auténtico disparate.

A través de un escrito, el Comité sostiene que "el árbitro es la autoridad deportiva "única e inapelable" en el orden técnico para dirigir los partidos, por lo que no es posible revocar una decisión arbitral invocando una discrepancia en la interpretación de las Reglas del Juego o incidencias de carácter técnico sobre el devenir del encuentro, cuya competencia "única, exclusiva y definitiva" corresponde al colegiado".

Sigue la persecución arbitral contra la "MSN"

Además, añaden que "la atenta visión de la prueba videográfica aportada no permite concluir que concurra ninguno de los dos supuestos citados, pues nos encontramos en definitiva ante una valoración diferente por parte del club alegante de unos determinados hechos consistentes literalmente en "Retrasar la salida del terreno de juego para poner en orden su equipamiento". 

Conclusión, Leo Messi sigue con tres cartulinas amarilla y se une al rosario de amonestaciones que han sufrido sus dos compañeros de la "MSN" este curso. Pues eso, pájaros disparando contra escopetas....