El portero del Majadahonda habla claro: “Si los jugadores fuesen como Vinicius no habría racismo"

A sus 24 años, Cheikh Kane Sarr ha pasado de ser un futbolista casi anónimo a ser uno de los nombres propios del fútbol español en la actualidad, aunque no por el tema que muchos quisieran. El guardameta del Rayo Majadahonda ha vivido unas últimas 72 horas de auténtica locura después de que decidiera dirigirse en pleno partido a un aficionado que le estaba atacando con insultos racistas.

Respecto a esta lamentable situación, el senegalés habló por primera vez, concediendo una entrevista a 'El Mundo' en la que ha querido dejar claro varios puntos, incluyendo por supuesto cómo sucedió todo y la postura que muchos de sus compañeros de profesión deberían de tener ante este tipo de situaciones. "No puede ser que al que insultan y sufre, además lo sancionen. No se qué pasará con la decisión del Comité de Competición, pero me gustaría que pensaran en esto. A nadie al que insulten se puede sancionar por reaccionar", explicó.

Y es que el guardameta se enfrenta a una posible sanción por haber decidido dirigirse a la grada en medio del partido, aunque insistió que "no fue violencia, fue querer dialogar", señaló. "El árbitro ni siquiera se acercó a preguntarme a mí qué había pasado. ¿Cómo puede ser eso? La verdad, pensé que lo primero que iba a hacer era protegerme a mí, pero no. Lo que hizo fue expulsarme", sostuvo.

Vinicius, una clara referencia para Sarr en este momento

Además, ha tocado un punto clave para muchos, la postura que tiene Vinicius ahora mismo respecto a los ataques racistas que ha recibido en algunos campos de LaLiga. "Voy a muerte por él porque él lo ha vivido. No hay sentido que haya racismo. Estoy muy orgulloso de él. Le doy las gracias por apoyarme. Le he dado las gracias por su publicación en Instagram. Si todos los jugadores de color fuésemos como Vinicius, el racismo se acabaría", explicó Sarr.

Una historia que no debería repetirse en ningún otro lugar

Ya sobre el hecho en concreto, el portero del Majadahonda relató que "cuando cambiamos de campo, ya empecé a notar algunos gritos. En el minuto 50 empezaron a hacer los sonidos del mono, del simio. En el 82, después de recibir el segundo gol, fui a coger agua para beber. Entonces escuché de todo: 'Negro de mierda, puto negro'. Antes de esto había mucha otra gente que insultaba, no sólo a mí, también insultaban a los españoles, mucha gente. Pero entonces escuché a este señor", relató.

"No podía más. Estaba muy nervioso. Había escuchado los gritos. Estoy en ramadán... Quería preguntarle por qué me trataba así, si tenía o no familia y podía comprenderme. No tenía intención de agredirle para nada, en absoluto. Por eso le agarré por la bufanda. ¿Cómo iba yo a pegarle? Jamás he agredido a nadie. Si me sancionan, ésta será la primera sanción que tenga en mi vida", aseguró Cheikh Kane Sarr.