Unos brillaron más y otros menos, pero en general las sensaciones del Barça tras su primer partido de pretemporada fueron buenas. Después de la flamante victoria ante la Juventus, la plantilla azulgrana realizó este domingo una suave sesión de recuperación, en la que todas las miradas fueron a parar a dos miembros del tridente, Neymar y Luis Suárez.
El brasileño sigue siendo protagonista por su futuro, y es que tras un día en el que parecía que sus compañeros habían logrado convencerle y en el que se lució con una exhibición sobre el césped, parece que su continuidad sigue sin estar del todo clara.
La primera reunión de la directiva con su padre, que controla de primera mano las negociaciones con el PSG, no habría tenido el éxito esperado, y es por eso que sobre el de Sao Paulo aún planean las dudas sobre una posible marcha. El culebrón seguirá al menos un día más.
Luis Suárez, tocado
Por otro lado, Luis Suárez también fue uno de los más seguidos sobre el verde, y es que en su aparición en la sesión matinal mostró una visible cojera después del encontronazo con Giorgio Chiellini durante el debut del Barça en la International Champions Cup.
A pesar de que el uruguayo se encuentra bajo observación por los servicios médicos, parece que sólo se trata de una contusión, y al no haber lesión el delantero insistió en entrenar con el resto de sus compañeros