El Real Madrid despide la pretemporada con derrota ante la Juventus (3-1)

Alarmas encendidas en un Real Madrid que ha vuelto a 'calcar' su historia del Clásico. En Orlando, los de Carlo Ancelotti cayeron con goleada ante una Juventus que aprovechó sus pocas ocasiones para imponerse en el marcador y que vio cómo, una y otra vez, los madridistas desaprovecharon ocasiones claras. La Casa Blanca, a poco más de una semana para su debut en LaLiga, tiene más trabajo del esperado.... y la necesidad, urgente, de contar con un goleador. 

El entrenador de Reggiolo puede tener dos cosas claras a su vuelta a Madrid. La primera es que el equipo necesita dar un paso adelante en el apartado defensivo. De manera inmediata. Se marchan de Estados Unidos con ocho goles en contra, en cuatro partidos, y con la sensación de que el rival necesita muy poco para pisar el área de Thibaut Courtois y anotar. Prueba de ello fue la llegada de la 'Vecchia Signora' antes de que se cumpliera el minuto de juego tras una mala salida de balón: McKennie estrelló el balón en el palo y, el rechace, fue aprovechado por Keane para abrir la lata. 

El Madrid, un coladero en Estados Unidos

Fue la tercerca vez que el Madrid comenzaba el partido por detrás en el marcador y, si bien se hicieron con el control casi absoluto del partido y de las ocasiones, fue intrascendente en el electrónico. Entre las paradas de un acertado Szczesny y la mala pegada de los 'merengues', la historia sonrió para los italianos. Esa es, precisamente, la segunda 'cosa' que Ancelotti puede tener clara en su vuelta a Madrid: necesita contar con alguien que releve, verdaderamente, a Karim Benzema y Marco Asensio. Entre los dos ya superaron los 40 goles el curso pasado. 

Con Vinicius Jr y el centro del campo poblado, pero desordenado, no es suficiente. Las ocasiones están, el peligro está... pero los goles no hacen acto de presencia. Y es que, a los veinte minutos, ya se veían 2-0 en el marcador después de una gran definición de Weah, que apareció solo para rematar dentro del área. Eso, y las indicaciones en el cooling break, pareció ser el despertar el Madrid, pero no fue suficiente. 

Frustración en Madrid

Jude Bellingham comenzó a aparecer más y, entre una de las tantas ocasiones, Toni Kroos envió un gran balón en largo a 'Vini', que gabó la carrera y resolvió, con bastante facilidad, en el arco de un Szczesny que volvió a aparecer, en reiteradas ocasiones, para frustrar las esperanzas de los madridistas: detuvo una a Nacho y 'sentenció', más, al Madrid. Con la reanudación, fue la misma historia: las ocasiones no se transformaron en goles, a pesar de que lo intentaron. 

El inglés acabó frustrado, con varios disparos, y vio cómo se estrellaba siempre. El acierto no estaba de su lado y tampoco de un Fede Valverde que, con un gran disparo, mandó el balón al larguero. Courtois pocas veces apareció, salvo en el 85' cuando tuvo el paradón de cada día para evitar el gol de Gatti, pero no pudo hacer nada pocos minutos después ante un gol de Vlahovic para cerrar el encuentro.