La enfermería del Real Madrid está repleta, por lesiones y casos positivos de COVID-19. De cara a los próximos encuentros de los merengues, ante el Villarreal por LaLiga e Inter en la cuarta jornada de la fase de grupos de la Champions League, Zinedine Zidane llega con lo justo y sin la presencia de jugadpres claves. Nacho Fernández, Fede Valverde y Dani Carvajal se encuentran recuperándose de sus respectivas dolencias y al francés solo le queda la esperanza que los contagiados por coronavirus den negativo en las próximas pruebas PCR. 

En agosto, el conjunto madrileño había anunciado el positivo de Mariano Díaz. Desde entonces, ningún jugador se había contagiado, hasta principios de este mes. El 2 de noviembre, la Casa Blanca anunció que Éder Militao tenía coronavirus y cinco días después, el 7 de noviembre, confirmaron los positivos de Casemiro y Eden Hazard, dos jugadores que el Real Madrid echó de menos en la derrota ante el Valencia en Mestalla (4-1). 

Después del parón de la FIFA, el Real Madrid vivirá unas semanas claves, tanto en LaLiga como en la Champions League, donde se jugará su permanencia en la competición ante el Inter de Milán en el Giuseppe Meazza. Zidane espera contar con, al menos, Casemiro y Militao en los próximos días para que se reincorporen a los entrenamientos grupales antes del regreso de los internacionales. 

Hazard sigue dando positivo 

El delantero belga estará alejado de los terrenos de juego y entrenamientos por al menos una semana más. Roberto martínez, seleccionador de Bélgica, expresó en rueda de prensa que el jugador del Real Madrid "sigue dando positivo" y no estará disponible ante Dinamarca, en la última fecha de la fase de grupos de la Nations League. 

Del estado de salud de los jugadores se conoce muy poco. El club de la capital española informó que se encontraban asintomáticos y aislados en sus domicilios. En el caso de Hazard, está confinado en su país. Casemiro y Militao, que fueron citados por la selección brasileña, se quedaron en Madrid para recuperarse.