El Real Madrid comenzó la temporada con polémica en su partido contra el Celta de Vigo. Especialmente porque el primer gol del equipo de Zinedine Zidane encerró una situación arbitral que creó controversia en las redes, ya que el tanto debería de haber sido anulado por una falta en el inicio de la jugada.

Karim Benzema se encargó de rematar al fondo de las mallas una asistencia de Gareth Bale tras una gran jugada del delantero galés que, pese a que hace dos días parecía tener pie y medio fuera del Real Madrid, parece que a día de hoy es uno de los jugadores más en forma del conjunto madridista.

Eso sí, el gol no debió subir al marcador ya que, en el inicio de la jugada, Casemiro cometió una clara falta sobre Gabriel Fernández al atropellar al delantero del Celta. Sin embargo, el colegiado Estrada Fernández no apreció que hubiese habido infracción y dejó continuar la jugada ante la indignación de Balaídos.

De este modo, el Real Madrid consiguió adelantarse en el marcador contra un Celta de Vigo que todavía debe hacer mucho trabajo para encajar la gran cantidad de piezas nuevas que tiene en la plantilla. Denis Suárez, Olaza o el propio Gabriel Fernández son algunas de las caras nuevas de los gallegos.

Además, el equipo de Zinedine Zidane se libró de la gran amenaza que supone el fichaje​ estrella del equipo gallego -con el permiso del ex azulgrana Denis Suárez- para esta temporada: Santi Mina. El delantero hubiese sido un problema para los blancos, pero se perdió el duelo por lesión.

Un Real Madrid motivado por la derrota del Barça

El Real Madrid tiene claro que quiere arrebatarle LaLiga al FC Barcelona y en la primera jornada ya gozó de la oportunidad de sacar ventaja. Los culés perdieron contra el Athletic Club y los madridistas, pese a no mostrar un buen juego, dieron chispazos contra el Celta de Vigo.