El Bernabéu ya presenció otro 'robo' en el Real Madrid-Bayern de 2017

Si el colegiado de este miércoles, Michael Oliver, acabó siendo el protagonista del partido -y de la eliminatoria- para regalar al Real Madrid el pase a las semifinales de la Champions League con un penalti de lo más injusto en el último minuto, cabe recordar que la temporada pasada el conjunto merengue también avanzó con una gran polémica a la siguiente ronda del torneo.

Por aquel entonces el árbitro encargado de impartir justicia -o al menos eso era lo que debía hacer- en el Real Madrid-Bayern Múnich hizo todo lo contrario, una injusticia histórica que pasó a los anales de la historia del fútbol moderno. Y pasó porque el húngaro dejó a los alemanes con un jugador menos en el segundo tiempo de forma injusta y dio como legales dos tantos de Cristiano Ronaldo en claro fuera de juego.

Robo histórico en un Real Madrid-Bayern

El Santiago Bernabéu, con ello, fue testigo de uno de los mayores robos de este siglo en la Champions League. Todo comenzó al no expulsar a Casemiro por segunda amonestación tras cometer un clamoroso penalti sobre Arjen Robben. Tampoco valió otra agresión de libro al holandés para dar con él lejos del terreno de juego, algo que habría sido merecido.

En cambio, el húngaro se coronó mostrándole la segunda amarilla a Arturo Vidal. En esta demostró no entender el reglamento, pues el chileno se lanzó al suelo a un balón dividido que se llevó antes que Marco Asensio, acabando el balear después por el piso. No era ni falta, mucho menos la cartulina que Kassai mostró. Desde entonces, el Bayern Múnich tuvo que remar con un hombre menos llegando hasta la prórroga.

'Dobletazo' de Kassai en el Real Madrid-Bayern

A todo eso hay que añadirle los últimos dos goles de Cristiano en claros fueras de juego. El delantero del Madrid recibió absolutamente solo dentro del área, tan solo porque la defensa bávara había lanzado el fuera de juego y el de Madeira había picado. Pero el que 'picó' de verdad fue el colegiado, además de sus linieres y el árbitro del área que, una vez más, no hizo nada. Dieron como legal su posición y le dejaron anotar el segundo gol.

Ese tanto hundió a un Bayern Múnich que minutos después recibiría el mazazo del tercero, también en posición ilegal del de Madeira. Era Marcelo quien se colaba por el centro de la defensa alemana y le daba el pase de la muerte a 'CR7', que empujaba a placer. En definitiva, puede decirse que el Real Madrid pasó este miércoles contra la Juventus gracias al árbitro, sí... Pero la historia se repite.