Piqué se 'retrató' ante el Inter y fue el eslabón más débil del Barça

El FC Barcelona es otro equipo desde el parón de selecciones. Las lesiones han obligado a Xavi Hernández a improvisar con su defensa en los últimos partidos de Liga y Champions League, devolviendo a Gerard Piqué al once ante la falta de variantes. El miércoles, el experimentado defensor demostró por qué el técnico egarense le quería afuera del equipo en verano. Lamentablemente, el físico ya no le da para las grandes citas.

Después de una correcta primera parte en la que el equipo tuvo el control del balón y arrinconó al Inter en el tramo final, logrando el 1-0 transitorio, en cada contragolpe 'nerazzurri' aparecían las dudas en el fondo culé. Edin Dzeko remató de primera un centro perfecto de Calhanoglu, pero el remate se estrelló en el travesaño y rebotó en la línea de gol, para fortuna de los locales. Dumfries también probó a Ter Stegen antes de la primera hora, aprovechando los espacios de la zaga culé.

En el retroceso, Piqué evidenciaba una enorme lentitud para cubrir los espacios que dejaba Marcos Alonso en sus constantes subidas. Eric García también sufría por derecha y, en la segunda parte, ambos se vinieron abajo ante un gran Lautaro Martínez. El argentino hizo lo que quiso con los centrales y convirtió el 1-2 transitorio aprovechando una mala salida de Busquets para dejar regado a Eric.

Previamente, Gerard había sido el gran responsable del empate del Inter en la primera ocasión de peligro del complemento. Un centro de Alessandro Bastoni encontró a Nicolò Barella totalmente solo a espaldas del '3'. El central rompió el fuera de juego saliendo a destiempo e, inexplicablemente, dejó pasar el centro para que el mediocentro italiano fusilara a un Ter Stegen que fue figura en el final. 

Piqué, espectador de lujo en el tercer gol del Inter

Con el Barça volcado en ataque, el Inter se dedicó a contragolpear en el tramo final y, en el 89', Lautaro habilitó a Robin Gosens para poner el 2-3 que parecía sentenciar la eliminación culé. El delantero argentino aguantó la llegada del jugador alemán ante la pasiva marca de un Piqué que ni achicó ni presionó, facilitanto la asistencia para el tercer tanto 'nerazzurri'. Noche fatídica para el jugador de 35 años quien, difícilmente, volverá a ser titular en Europa esta temporada.