Busquets, Koeman y una receta para el éxito después de los 30 años

El peso de Busquets en la plantilla es indudable y eso lo sabe Koeman también, que desde que llegó al club ha estado pendiente de cómo solucionar lo que sucede en el mediocampo del Barcelona, lleno de talento pero falto de oxígeno y piernas ante la edad de Sergi y la inexperiencia de Pedri.

El joven de 18 años todavía aprende a dosificar su físico y forma parte de su evolución, pero en el caso de Busquets el calendario es más bien su enemigo, que sigue avanzando sin tregua y va restando capacidades físicas. Solo su gran inteligencia, talento y conocimiento táctico le permiten seguir vigentes y en el podio del mundo.

Koeman aprendió rápido a manejar sus jugadores y hacerlos encajar en el mejor sistema posible, por lo que así como Pjanic no cuenta en el club, Busquets participa en casi todos los encuentros posibles y ya tiene 46 apariciones en 50 partidos, cifras que están por encima de los números que dejó el año pasado.

Pero no solo en eso supera la campaña anterior. El mediocampista español también acumula 27 sustituciones, la mayor cantidad en toda su carrera tras los 19 de la 19-20, que ya en ese momento fue la mayor cantidad en toda su trayectoria dentro del Barcelona, único club en el que ha jugado Sergi.

En Liga también tiene récord de sustituciones con 18, cinco más de las que acumuló hace una temporada con la accidentada campaña que tuvo el Barcelona. A pesar de haber sonado como posible salida del club esta temporada, Busquets supo ganarse la confianza de Koeman y mantenerse en el club de toda su vida.

Sin opciones

Esta medida de Koeman responde a dos cosas principales: Pjanic no cuenta y no hay recambios. El ex jugador de la Juventus no está en los planes del holandés pese a ser uno de los mediocampistas de mejor caché en Europa a su llegada, mientras que las otras opciones no responden a lo que ofrece Busquets, motivo por el que el técnico insiste en la llegada de Wijnaldum.