Sergi Roberto, Clément Lenglet y Sergiño Dest fueron los grandes señalados en el empate del FC Barcelona ante el Levante UD, en el encuentro correspondiente a la jornada 36 de LaLiga Santander y que prácticamente baja de la lucha por el campeonato al cuadro dirigido por el míster Ronald Koeman, quien ahora deberá apostar por un verdadero milagro para volver a tener opciones, tomando en cuenta que tanto el Atlético de Madrid y Real Madrid CF disputarán sus compromisos de la mencionada fecha entre este miércoles y jueves.
Otros de los apuntados fue el portero alemán Marc-André ter Stegen, quien nada pudo hacer para ver su meta abatida hasta en tres oportunidades y en menos de 30 minutos por los 'granotas', quienes remontaron un 0-2, tras los goles del argentino Leo Messi, en el 25', y el juvenil Pedri, en el 35. Sin embargo, dos goles en cinco minutos del Levante: uno de Melero, en el 56, y otro de Morales, en el 59, puso a los azulgranas contra las cuerdas.
Los catalanes recibieron otro respiro gracias a un gol de Dembélé, en el 64', pero el partido se igualó otra vez en el 83' en las piernas de Sergio León, quien puso el 3-3 definitivo. "Como entrenador eres el máximo responsable. Hablamos en el descanso de seguir con la intensidad, pero en la segunda parte bajamos. Nos vamos tocados porque tuvimos nuestras esperanzas. Con un 0-2 no esperas un empate", fueron las palabras de Koeman, quien ha sido señalado como el principal responsable del empate que prácticamente deja tirada LaLiga.
Incompresiblemente, ubicó a Sergi Roberto como central teniendo a Umtiti y Mingueza en el banquillo, y el técnico lo ha pagado muy caro. Una decisión controversial, que podría colocarlo fuera del proyecto que construye el presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, quien ahora tendrá más que un argumento para pasar de Koeman y buscar a otro entrenador.
Koeman acepta que se le cuestione
"Entiendo que se cuestione", fue la frase más incendiaria que ha dejado Koeman en la rueda de prensa tras el partido, como muestra de que está en pleno conocimiento, de que el partido contra el Levante, es el auténtico 'saca entrenadores'. "Tras el 2-2 tuvimos una buena reacción, pero no defendimos bien. No es normal encajar tres goles en 45 minutos. No para un equipo como el Barcelona", reconoció.