Cuando las cosas estén complicadas, llamen a Griezmann para solucionarlas. Parece ser el lema del Barcelona en este tramo final de la temporada con el francés que se reenganchó en la titular del equipo y además está de dulce con el gol, capaz de sentar a Dembelé y también marcar goles importantes.

Como el de esta jornada, en la que necesitaban ganarle al Valencia y lo consiguen de momento gracias a que Antoine estuvo fino y atento en una jugada de cazador, algo que extrañan los culés con la salida de Suárez, pero en las últimas semanas, Griezmann viene mostrando cualidades para dominar la zona.

El Principito dijo presente una vez más con el Barcelona  en medio de una complciada jornada y sigue sumando puntos para quedarse en la plantilla, algo que sigue sin asegurarse desde ningún sector en la Junta Directiva, centrada en aligerar la carga salarial y sanear el flujo económico de la institución.

La dupla que forma el francés con Messi sigue dando frutos con el argentino en modo pichichi y Griezmann concentrado en aprovechar cada oportunidad que tiene, sabiendo que el haber sentado a Dembelé es gracias a su esfuerzo y rendimiento ante los ojos de Koeman al momento de hacer las alineaciones.

Griezmann sigue en un alto nivel de eficacia ante las chances de gol que tiene, aunque la tarea de sentenciar partidos sigue en el aire para el galo y para toda la plantilla, que cada vez que se adelanta parece relajarse y le cuesta poner candado a los partidos, algo que sucedió ante el Valencia tras el golazo de Carlos Soler que devolvió el frío al cuerpo a los culés.

Salvador de Koeman

A pesar del título de Copa del Rey conseguido por el equipo, el futuro de Koeman sigue en el aire de cara a la próxima temporada, con el rumor de que en caso de no ganar el título liguero podría ser destituido, aunque tras el anuncio de Naggelsman con el Bayern de Múnich, ha perdido fuerza esta posibilidad.