La joven promesa brasileña, Gustavo Maia, realizó su primera sesión de entrenamiento con el equipo azulgrana el pasado viernes por la mañana. El ex delantero de Sao Paulo ha firmado por cinco temporadas con el Barça B de García Pimienta. Se trata de un refuerzo del que se espera que dé un salto de calidad al equipo.

Como sus nuevos compañeros se encuentran de vacaciones tras disputar el Playoff de ascenso, ha tenido que ejercitarse de forma individualizada con los jugadores del primer equipo; siempre respetando la distancia de seguridad con un grupo de jugadores que ya llevan varios días entrenando juntos.

Por fin, el nuevo fichaje del filial ha podido realizar la primera toma de contacto con el verde de la Ciutat Esportiva. Hace unos días ya pasó la revisión médica pertinente; y aunque su fichaje es totalmente oficial y anunciado por el club, falta hacer el acto protocolario de la firma, acompañado, como no podía ser de otra forma de Xavier Vilajoana, responsable de la cantera y el femenino.

Una apuesta arriesgada

El club apuesta por el delantero brasileño, eso es evidente. Debemos recordar que el Barça ha desembolsado 4,5 millones de euros al Sao Paulo, fraccionado en dos pagos, por un jugador con ficha del B en el equipo brasileño. Ni siquiera pertenecía al primer equipo, aunque ya había debutado

Una de las cualidades por las que el club decidió ficharlo es su polivalencia en ataque. Aun ser un jugador con instinto anotador, cae por banda para jugar como extremo. Podría ocupar la posición de punta en según qué partidos, pero la intención del Barça B es seguir buscando un sustituto para Rey Manaj en el centro del ataque.

La faceta realizadora del filial es, actualmente, el aspecto que más preocupa a García Pimienta de cara a la temporada 2020-20121. La falta de gol, entre otras cosas, fue uno de los motivos por los cuales el B se quedó sin ascenso, pese a quedarse realmente cerca de conseguirlo.