Si en el primero fue el asistente, el segundo fue protagonista, porque Fenkie De Jong viene mostrando esta temporada que está para todo lo que necesite su equipo, desde jugar como defensa central hasta pararse en la zona de gestación y abrir marcadores, tal como esta final, que le vio una vez más marcando un gol.

El holandés se adaptó a la perfección a este nuevo rol que le dio Koeman, el de todocampista a plenitud con llega desde segunda línea, asistencias, colaboraciones en defensa, armar el juego y también ser el defensor central que a va a morder en la frontal del área. Todo le sale bien esta temporada y rara vez se le ve equivocarse. La final ante el Athletic terminó por consagrarse en el rol importante que tiene y lo demostró en el marcador, siendo el puñal por derecha para mandar un pase medido a Griezmann y adelantar al club.

Minutos después quiso seguir la fiesta y aprovechó muy bien un centro milimétrico de Jordi Alba para poner de cabeza el segundo gol, casi en las manos de Unai Simón su remate que sorprendió a toda la zaga bilbaina. Rompió a la perfección la línea final del rival y supo encontrar el espacio para poner el segundo del Barcelona que apenas saboreaba la sangre, porque la fiesta seguiría y cómo no, de la mano de Frenkie.

El tercer gol fue una auténtica obra de arte y De Jong participó en medio gol, tras recibir un balón en pared que pudo entregar limpio a Messi a las espaldas de la defensa contraria para que en el área, el argentino demostrara que eso del "mejor jugador del mundo" no es de gratis, y que para tenerlo hay que estar siempre en la cima. Recorte de aquellos que dieron balones de oro, tercero en el luminoso y abrazo para De Jong.

Razón tenía Koeman cada vez que mandaba un mensaje desde la selección holandesa diciendo que Frenkie podía jugar muchísimo mejor de lo que lo hacía en el club para aquel momento, porque apenas llegó lo colocó donde creía y desde ese momento todo fue para arriba con el mediocampista, que ya prometía en el Ajax y ahora se convirtió en un auténtico valuarte y jugador importante para el Barcelona en el mediocampo.

MVP silencioso

Aunque el trofeo de MVP se lo dieron a Messi por la calidad de goles que dejó y su buen partido, De Jong comienza a acostumbrar a todos a mostrar este gran nivel con el Barcelona y para verlo fallar o por debajo de esto, todo el equipo tiene que demostrar alguna carencia. Pero incluso en las noches más grises del club, Frenkie se ha mostrado decisivo.