"Es el gran partido de los octavos de final y no será sencillo. En el Barça, para los aficionados y para el club, es muy importante ganar al París Saint-Germain (PSG). Es clave pasar esta eliminatoria porque el Barça tiene que estar entre los mejores cada año", fueron las palabras del bosnio Miralem Pjanic antes del duelo de ida por los 8vos de final de la UEFA Champions League, en el cual terminaron cayendo 1-4 ante los dirigidos por Mauricio Pochettino y en el que solo actuó por 12 minutos, cuando el partido ya estaba prácticamente liquidado y solo restando el tercer gol del francés Kylian Mbappé en el 85'.
Exactamente, Pjanic ingresó en el minuto 78 para sustituir a Pedri, quien como el resto del equipo fue superado por la máquina gala. Sin embargo, el partido de estos dos jugadores dejó datos que describen un poco la noche aciaga que se vivió en el Camp Nou. Por ejemplo, el canario, responsabilizado en las últimas semanas de "regresarle la sonrisa a Messi", dio menos pases que Pjanic jugando 66 minutos más.
De acuerdo a datos proporcionados por Opta, el ex Juventus culminó con 20 pases, mientras que Pedri otorgó 18. El veterano futbolista erró dos y el chaval falló cinco. En el ámbito de las recuperaciones, Pjanic también estuvo por encima con cinco por las tres del joven de 18 de años. Las estadísticas para nada rompen con la progresión de la catalogada gran promesa azulgrana, pero sí resultó un golpe de los muchos que recibió el FC Barcelona en el partido, un compromiso que también dejó una mala exhibición de Busquets y De Jong.
Koeman, tras el partido, fue consciente que no debe ser particularmente severo con la plantilla, especialmente con los más jóvenes. "Pedri en los próximos 5 años será mejor que cualquier centrocampista del PSG", comentó cuando fue preguntado por el jugador, en medio de la conmoción en el barcelonismo por otra dura derrota en la máxima competición europea. Pese a todo, pidió tiempo para los chavales llamados a protagonizar la reconstrucción del club.
Paciencia para los talentos
"Tenemos que ser pacientes. Sé que es difícil, pero soy realista. Cambiaremos las cosas y trabajaremos para lograrlo", agregó Koeman, quien durante el presente curso no le ha otorgado muchas oportunidades al bosnio, que llegó precisamente para bañar de su experiencia a una joven plantilla en compromisos de alto nivel, como el que se desplegó este martes en el Camp Nou. Al final, la juventud y explosión de Pedri se quedó corta. Y la experiencia, nuevamente congelada en el banquillo. Sí, otra vez.