Una de las llegadas más sorprendentes que tuvo el Barcelona el pasado verano fue la de Matheus Fernandes, un centrocampista brasileño que llegaba del Palmeiras a cambio de 7 millones de euros y que apenas tuvo minutos con el Real Valladolid donde fue cedido por seis meses. De hecho, ni siquiera fue presentado oficialmente.

El brasileño aún no se ha ganado la confianza del técnico del Barcelona, Ronald Koeman. Se le intentó buscar una salida el pasado verano, pero no se encontró ningún equipo que estuviera interesado en él. Solamente ha disputado 17 minutos con el primer equipo. Esto ocurrió en la cita de los culés en la Champions League contra el Dinamo de Kiev, partido que, por cierto, tuvo muchas rotaciones de jugadores.

Elogio y exageración

En el momento en el que se concretó la operación de fichaje del centrocampista de 22 años, Eric Abidal todavía era secretario técnico del Barcelona. Según informó este lunes SER Catalunya, el área deportiva del combinado azulgrana, llegó a asegurar que el joven era “el nuevo Busquets”. Su estatura de 1,83 metros y su posición -de pivote parecía responder al perfil del 5.

Sin embargo, la realidad del brasileño es una totalmente diferente a la de Busquets. Con Koeman no ha disputado ni la Copa del Rey ni ningún compromiso de LaLiga Santander. Es un habitual en caer de las convocatorias y todo lo que no sea una salida la próxima ventana de fichajes será una sorpresa en mayúsculas. Jóvenes como Riqui Puig o Ilaix Moriba le han pasado claramente por delante.

A sus 22 años, Fernandes sigue teniendo contrato con el equipo barcelonista hasta mediados del 2025. Justo ahora, se encuentra en la lista de jugadores que, para la directiva liderada por Joan Laporta, pueden ser transferibles y cedibles, pero no será nada fácil darle una salida. Desde que llegó a España, ni ha tenido minutos y ni ha convencido al Barça o al Real Valladolid. Lo curioso del caso, es que en una entrevista que se le hizo tiempo atrás, el joven afirmó que su ídolo era Busquets

Cómo fue su fichaje

Meses atrás, Alexandre Mattos, director deportivo de Palmeiras, contó en una entrevista con Fox Sports cómo fue que el Barcelona lo fichó: "En octubre de 2019, llamé a André Cury (ex responsable de captación del Barça en Brasil) y le pedí que hablara con Abidal porque quería enseñarle a un jugador. Cury pensaba que era Dudu. Abidal fue a ver un entrenamiento del equipo reserva de Palmeiras. Le dije 'mira el número 35'. En ese momento, me llamaron loco. ‘¿Quieres vender un jugador de reserva de Palmeiras, que juega poco, al Barcelona?’", relató

El brasileño es un mediocentro puro, le gusta participar en el juego combinativo, aterrizó en Pucela para e ir adaptándose al fútbol español. Sin embargo, no ha llegado a ganarse la confianza de los equipos en los que ha jugado. El recuerdo que dejó en Valladolid, sin embargo, es bueno. De acuerdo a una publicación de Diario MARCA, lo describen como alguien educado, con ganas de mejorar, que preguntaba en qué podía mejorar. Con calidad, pero todavía por desarrollarse en lo físico.