Laporte sigue en un mar de dudas dentro del Manchester City, sin saber nada sobre su futuro y tampoco sobre los planes de Guardiola, que podría sumar a Sergio Ramos a su plantilla tras el anuncio de adiós que realizó el Real Madrid sobre su capitán y figura durante 16 años en la defensa.

Esta temporada se esperaba un ostracismo total para el defensor que vio la llegada de Rubén Dias como clara competencia y aviso de salida, pero Stones ha alternado la titularidad con él junto al portugués, que viene siendo el mejor jugador defensivo de la presente temporada y en la Euro comenzó muy bien.

La confianza del técnico parece haberse tocado y el jugador sigue sin saber el motivo, ya que el haber sido suplente en la final de la Champions fue tan sorpresivo como inesperado para él. El mercado se mueve con rapidez y esperan solucionar cuanto antes todo lo necesario para su futuro, sea o no en Inglaterra.

Su papel en la Euro será determinante para marcar la pauta del equipo que quiera ficharlo, esperando que pueda ser en España el lugar que aterrice en caso de salir de la disciplina citicen. En esa ecuación, entra el Barcelona como gran candidato a llevarse al jugador para reforzar una zona bastante complicada.

Compra, imposible

Laporta no quiere hacer gastos grandes salvo que sean necesarios, como la operación de Emerson, que podría amortizarse en una venta del brasileño o también en la salida de Sergi Roberto. Sin importar el precio que logren acordar con el City, en Barcelona no ven la opción como algo viable en la economía del club.

Trueque, complicado

El cambio de jugadores sigue siendo la principal carta a jugar por parte del Barcelona, con fichas interesantes tales como Dembelé o Griezmann, pero son jugadores que tienen un valor mayor a Laporte y los clubes saben de la urgencia culé, que también cuenta con el hecho de que los jugadores no quieren bajarse el sueldo.

Ante la complicada situación, el Barcelona buscará manera de hacer caja para poder pagar el contrato de Messi y al mismo tiempo, darle a la plantilla el oxígeno que necesita, el mismo que puede aportar un jugador como Laporte.