El destino parecía haber puesto en el camino de Neymar Jr. la posibilidad de convertirse en uno de los verdugos de esta noche para el FC Barcelona y alimentatr un poco más esa rivalidad reciente entre ambos, cuando hace algunos años lo fue para su equipo actual con una remontada histórica que lo tuvo como uno de sus principales artífices.

Sin embargo, su marcha al PSG en una escandalosa transacción que se saldó con un importe de 222 millones de euros por parte de los parisinos como pago de su cláusula de rescisión, fue vista como un acto de deslealtad hacia el equipo azulgrana. Desde entonces, el brasileño ha acumulado una decena de lesiones, varias de ellas muy cerca de partidos importantes, como aquella que le alejó de disputar las semis de una Copa del Mundo en su país.

Con la ausencia del brasileño a causa de su última lesión ante el Caen, el técnico Mauricio Pochettino tendrá que optar por Kylian Mbappé para encabezar el ataque galo en el Camp Nou. El club ha acusado la ausencia de su estrella en varias ocasiones, tanto por dificultades físicas como por las celebraciones familiares del jugador.

Ha sido un duro golpe, según el entorno de Neymar

Una lesión en el aductor de la pierna izquierda ha marginado a Neymar de la convocatoria del entrenador argentino para uno de los partidos más importantes de la temporada. Se estima que podría encontrarse de baja por cuatro semanas y no hay garantías para el partido de vuelta en París.

Fuentes cercanas al jugador aseguran que se trata de una situación límite para él, que debe buscar rápidamente una solución, especialmente en esta ocasión, donde un partido clave necesitaba su presencia en el campo. En días recientes, su padre debió salir en su defensa ante los comentarios de Pascal Dupraz, entrenador del Caen, quien lo calificó como un “llorón”.