El récord más vergonzoso en la historia de Boca Juniors cumple 50 años

17 de marzo de 1971, la fecha que arriba 5 décadas este jueves para recordar un mítico encuentro entre Boca Juniors y Sporting Cristal, en el marco de la Copa Libertadores. Este choque está en el calendario como el más violento de la historia para todos los registros del fútbol mundial.

Un total de 20 equipos se dividían en 5 grupos de cuatro equipos cada uno, con dos puntos por victoria y solo un cupo por grupo para avanzar a la siguiente fase. Un escenario bastante complicado para luchar a muerte la presencia en la competición que ya de por sí, era exclusiva y de difícil acceso.

El encuentro entre ambas escuadras dejaba en juego la primera plaza, en la que podrían alcanzar a Universitario de Perú, que a todas estas miraba de lejos como salía favorecido de lo que sucedía. Un ida y vuelta constante durante el choque puso el 2-2 en el marcador para que a los 44 minutos, comenzara la debacle total en temas de disciplina.

De los 22 jugadores presentes, 21 estuvieron metidos en un riña colectiva que acabó muy mal y en la que solamente Julián Meléndez, de Boca Juniors, no participó. Todo comenzó por una falta inexistente que fingió Roberto Rogel, pero que el árbitro no haya pitado encendió el humor xeneize y todo se vino abajo.

Récord fatal en el fútbol

Un total de 19 expulsados dejó el encuentro en el que solamente se libraron tres jugadores de la tarjeta roja, siendo los dos arqueros y el mencionado Meléndez, que no llegó a participar en tal suceso. Campos (fractura en el tabique) y Mellán (conmoción) terminaron el día en el Hospital Argerich, mientras que Luis Torres (noqueado) fue hasta la Clínica Santa Isabel de Flores.

Los demás implicados que no terminaron con heridas graves, fueron hasta la Comisaría 24 y futbolísticamente el castigo fue suspender el juego y un punto para cada uno, aunque para Boca Juniors cayó la eliminación directa del torneo por parte de la Confederación Sudamericana.