Este sábado por la tarde, el FC Barcelona volvió a pinchar fuera de casa. Esta vez fue en el estadio de Balaídos contra el Celta de Vigo, en un partido en el que los culés jugaron un muy buen tiempo pero en el que se fueron apagando cuando se vieron con el marcador a favor. Y eso que todo se puso de cara cuando Luis Suárez consiguió poner por delante al Barça rematando de cabeza una falta lanzada por Leo Messi.

Pese a que Smolov consiguió empatar a pase de Okay Yokuslu, el mismo Luis Suárez puso el 1-2 avanzado el segundo tiempo. No obstante, a falta de un par de minutos para terminar los 90 reglamentarios, sucedió una jugada decisiva: Gerard Piqué se fue al suelo para intentar cortar el avance de Rafinha Alcántara, el hispano-brasileño se echó el balón adelante y se dejó caer cuando notó el contacto.

El árbitro Cuadra Fernández no dudó en señalar falta del defensa azulgrana sobre el mediapunta celeste cedido por el conjunto culé. Una falta que terminaría en un impecable lanzamiento de Iago Aspas después de una barrera mal colocada por Marc-André ter Stegen por no colocar un hombre más y mal defendida por Antoine Griezmann por saltar girándose y no obstaculizar lo suficiente el tiro del delantero gallego.

Finalmente, sucedió lo que el barcelonismo temía: que una acción muy dudosa por una falta posiblemente inexistente de Piqué sobre Rafinha terminó siendo decisiva para que el Barça perdiese de nuevo otros dos puntos en su lucha por LaLiga Santander. Además, después del partido, el propio defensa del Barça recurrió a Twitter para escribir un mensaje que suena a 'dardo' para su ex compañero.

"We were fated to pretend. To pretend", escribió Piqué a través de su perfil oficial. Se trata del título de una canción de la banda estadounidense MGMT que, traducida al castellano, se llamaría 'Estábamos destinados a fingir'. El catalán no hizo mención directa a Rafinha pero, dado que el hispano-brasileño exageró mucho el contacto en la acción previa al gol se puede deducir que ese mensaje fue una pulla para él.

Hay que recordar que, tras el pinchazo del Barça contra el Sevilla en el Sánchez Pizjuán, Piqué también realizó unas declaraciones en las que, de manera indirecta, dudaba de las intervenciones arbitrales. "Va a ser muy difícil ganar esta liga. Vistas las jornadas que han sucedido, va a ser difícil que el Real Madrid pierda puntos", dijo. El catalán, como gran parte del barcelonismo, parece indignado con las decisiones.

El tuit de Piqué