Ousmane Dembélé no ha dejado de ser un misterio en el FC Barcelona. Es un jugador joven pero con un gran talento que está haciendo una de sus mejores campañas con el equipo aportando para la consecución de triunfos que los lleven a la conquista del anhelado doblete: LaLiga y la Copa del Rey. Su explosividad en desequilibrio y velocidad son los factores que le brindan un plus importante al Barça, aunque no deja de ser un dolor de cabeza.

El barcelonismo de manera constante se pronuncia en torno al rendimiento de Dembélé. En ocasiones lo señalan y en otras lo alaban. Pero en lo que sí están de acuerdo es que es un jovencillo misterioso para el equipo, de repente explota al máximo su talento y en otras ocasiones se esconde y no aparece. Nunca se sabe qué hará, solo que su presencia en el campo ha sido vital.

Desde que dejó atrás las lesiones que siempre le acompañaban, Dembélé se convirtió en una pieza indiscutible en el esquema armado por el técnico Ronald Koeman. Hasta ahora, ha disputado 23 compromisos en LaLiga y ha anotado cinco goles, claves para la consecución de triunfos como fue el caso del último partido disputado del Barça frente al Valladolid, que lo venció por la mínima (0-1) con gol del delantero francés.

Los aficionados constantemente se pronuncian a través de las redes sociales refiriéndose a este particular jugador: “Dembélé es el mejor jugador malo de la historia” (@massanagranaire). “Juega como si un niño de tres años lo condujera en el FIFA” (@groovebcn). “Disléxico de pie” (davidjane1976). “Nos está petando la cabeza, en realidad, no hay bando donde ponerse. Me encanta la montaña rusa emocional que nos provoca en un partido” (@sbguarch).”Su superpoder es la aleatoriedad” (@Burkminster).

Salvaje y divertido

Indudablemente, Dembélé no es siempre el protagonista de los highlights, está siempre tan cerca de ser un poeta como de ser un poema. El francés en ocasiones parece jugar con los auriculares puestos y mirando su móvil. Y, aunque a veces parezca que no le suena el despertador y arranca los partidos como si llegara de la siesta, cuando decide corres es de lo más salvaje, atrevido y divertido de este Barça carente de gracia.

  • -¿Si tuvieras que definirte en tres palabra, qué dirías? le preguntaron
  • - Soy una persona bromista a la que le gusta reír muchísimo y.... ¿Qué más?
  • Se hace el silencio e interviene entonces uno de sus mejores amigos:
  • -¿Ousmane en tres palabras?
  • -No le va a gustar lo que diré- responde entre risas.
  • A continuación vemos un carrusel de amigos que lanzan adjetivos, pero sobre todo repiten uno -“¡genio!-, con la guasa con la que llamas personaje a un íntimo.
  • Una vez le pregunté a Suárez y se refirió a él con una mezcla de ternura y sorpresa. El tipo de asombro que provocan los niños que te hacen un lío en la casa mientras das sorbos al café.
  • “Tiene momentos que pierde el balón y al final llega, y tampoco sabes cuándo te va a tirar la pared o dónde tirársela. A veces sale a la contra, veo a Leo detrás mío y nos decimos: a este ya no lo agarramos”.