Pocos minutos para un Ansu Fati que merecía más protagonismo en San Paolo

A pesar de que al Barça le faltó verticalidad durante gran parte de los noventa minutos frente al Nápoles, Quique Setién llegó al minuto 87 habiendo realizado tan sólo un cambio en la alineación. Arthur Melo entró por Rakitic poco después de la hora de partido y el FC Barcelona, con el gol de Griezmann en el 57', buscó mantener el equilibrio en busca de la segunda diana.

Para ello habría ido muy bien colocar sobre el terreno de juego a Ansu Fati, pero Quique Setién no se atrevió a desorganizar la línea de cuatro centrocampistas. Dio entrada a Ansu Fati por Griezmann en el minuto 87, cuando quizá habría sido más positivo para los intereses culés que el bissau-guineano entrara antes al campo y no por Griezmann, sino por un efectivo del centro del campo.

El planteamiento del Nápoles, sin presionar arriba y encerrándose atrás para tapar espacios en defensa, regaló al Barça una posesión que debería haber aprovechado más. Ansu Fati era de los pocos jugadores que Setién tenía en el banquillo para generar profundidad, desequilibrios y amplitud al juego azulgrana, pero el técnico cántabro prefirió la apuesta más conservadora.

Le salió bien en cuanto a resultado, aunque el partido fue bastante gris y Ter Stegen tuvo que salvar al Barça en más de una ocasión. De cara al partido de vuelta de la eliminatoria, de aquí a unas semanas en el Camp Nou, se espera que Ansu Fati sí pueda formar parte del once titular debido a las bajas de Arturo Vidal y Sergio Busquets por acumulación de tarjetas.

Ansu Fati tiene todas las papeletas de jugar la vuelta

Rakitic, De Jong y Arthur conformarán con casi total seguridad la sala de máquinas, con Leo Messi, Griezmann y Ansu Fati en el frente de ataque. Ese sería un planteamiento mucho más ofensivo que el visto este martes en San Paolo. En el Camp Nou, además, está claro que el FC Barcelona irá a por el partido para cerrar cuanto antes la eliminatoria.

Ansu Fati, pese a no haber jugado ante el Eibar y haber permanecido muy poco tiempo sobre el césped en San Paolo, no debe preocuparse. Las oportunidades seguirán llegando, aunque de momento sea a cuentagotas, para demostrar que a sus 17 años ya tiene todo lo necesario para formar parte de la primera plantilla del FC Barcelona. Sólo necesita más confianza y minutos para seguir maravillando a propios y extraños.