El Sevilla recibió al Real Madrid este sábado, en el marco de la jornada 12 de LaLiga Santander, con un resultado de 0-1 a favor de los dirigidos por Zinedine Zidane. Se trataba de un duelo directo en la tabla de posiciones, ya que, antes de jugarse el partido, los andaluces se ubicaban en la quinta plaza de la clasificación, mientras que los capitalinos estaban cuartos.
El equipo blanco llegaba con la urgente necesidad de puntuar en su visita al Ramón Sánchez-Pizjuán, debido a que no había podido conseguir una victoria en los últimos tres encuentros de liga. Adicionalmente, su mal andar en la Champions League empeoraba aún más la situación y añadía mucha tensión al ambiente que rodeaba a Zinedine Zidane y a todo el resto de la plantilla madridista
Por su parte, el Sevilla llegaba al partido en una situación casi opuesta a la del Real Madrid, ya que había conseguido tres victorias en sus últimos tres partidos ligueros. Sin embargo, el último encuentro que el equipo que fue local en esta fecha disputó, en este caso, por la Champions League, terminó con una estrepitosa goleada en contra, endosada por el Chelsea de Frank Lampard, por un marcador de 0-4.
Apenas al inicio del encuentro, Vinicius Jr tuvo una clara oportunidad, pero su disparo se fue desviado y no pudo colarse en la portería defendida por Bono. Las acciones estuvieron calmadas desde ese momento hasta el minuto 37, cuando el mismo cancerbero sacó un gran disparo raso de Karim Benzema, manteniendo el resultado en una igualdad sin goles durante el primer tiempo.
Desatención de Bono y gol del Madrid
Más allá de las intervenciones de Bono durante el primer tiempo, el portero sevillista se llevó el mal rollo durante la segunda mitad del compromiso. Esto debido a que tuvo responsabilidad directa en el gol del Real Madrid, que llegó tras un centro rastrero de Mendy que el golero marroquí no pudo controlar y terminó colándose en la portería. Aunque Vinicius también participó en la jugada, barriéndose para tratar de empujar el balón dentro del arco, finalmente no logró tocar el esférico.
La presión que el Real Madrid ejerció sobre los intentos de acercamiento del Sevilla llevaron al equipo andaluz a cometer errores y perder el balón antes de tener más oportunidades claras. Adicionalmente, el bloque defensivo que Zidane ordenó plantar en el área de sus pupilos, sirvió para neutralizar todos los intentos de los locales de conseguir la igualdad en el marcador, por lo que el resultado no se movió más y los tres puntos fueron obtenidos por un urgido combinado Merengue.