El primer Clásico de la temporada, rodeado de incertidumbre

Una de las cosas más impredecibles que existen en el fútbol es el Clásico español entre FC Barcelona y Real Madrid. Es un partido que, debido a la rivalidad que existe entre ambos clubes y a la incidencia que puede tener en el resto de LaLiga, en cuanto a la posterior obtención del título, siempre saca lo mejor de ambos clubes. 

Sin embargo, este año se siente una energía distinta, debido al extraño momento que ambos clubes están viviendo. Ninguno ha mostrado su mejor versión, el Madrid no tiene una figura clara establecida y el Barcelona cuenta con su máximo exponente, Lionel Messi, en un estado de forma que no es el habitual del argentino, mucho más cabizbajo que en cualquier otro punto de su carrera.

En cuanto a números, la actualidad liguera de los dos equipos tampoco ha sido para nada regular. El Barcelona ha conseguido dos victorias, un empate, una derrota, marcando ocho goles y recibiendo dos, por lo que se ubica en la novena casilla de clasificación con siete puntos, con un partido pendiente por jugar aún. 

El Real Madrid, por su parte, a pesar de estar en el tercer puesto de la tabla, cuenta con los mismos números que los azulgranas, pero con un partido más disputado (y ganado) y con seis tantos anotados y tres en contra. Ninguno de los dos equipos puede esconder la gris realidad que los azota en LaLiga, puesto que ambos vienen de perder su último encuentro, con un rendimiento bastante por debajo de lo esperado de por medio. 

Estrellas en el banquillo del Clásico

Una situación interesante que trae consigo el próximo Clásico a disputarse es el choque entre Ronald Koeman y Zinedine Zidane, quienes en su momento fueron jugadores de los clubes que ahora dirigen y además fueron representantes de buenas épocas para sus respectivos equipos. Los dos protagonizarán lo que será un choque de titanes a nivel de conocimientos futbolísticos y de identidad culé y merengue. 

A pesar de que Koeman está empezando apenas su etapa como míster blaugrana y Zidane ya cuenta con bastante experiencia como técnico del Madrid, el venidero Clásico podría significar un punto de inflexión en la actualidad de ambos banquillos. De perder el partido, cualquiera de los dos equipos puede ver su confianza más trastocada de lo que está, así como decaer en la competencia por los puntos en la tabla de LaLiga, por lo que, aunque ambos clubes llegan al encuentro con un nivel por debajo del acostumbrado, la importancia que tiene el mismo los hará sacar lo mejor de sí para conseguir la victoria.