No hay manera de que Luis Suárez marque fuera de casa en Champions League -no lo hace desde 2015-, pero eso no quiere decir que no siga ayudando al Barça a conseguir victorias. Corría el minuto 57 de partido contra el Slavia de Praga, este miércoles, cuando el delantero uruguayo luchó por un balón en el interior del área y su disparo, que no iba a portería, fue desviado por Olayinka hacia el fondo de las mallas.

La acción, aunque no fue nada estética, sirvió al FC Barcelona para volver a ponerse por delante justo cuando el Slavia de Praga más estaba apretando arriba, habiendo dispuesto de varias oportunidades claras para decantar el marcador a su favor. La fe de Luis Suárez no le ayudó a romper su gafe lejos del Camp Nou en Liga de Campeones, pero sí a que el Barça sumase los tres puntos en el Eden Arena.

La lucha incansable del charrúa sigue dando buenos resultados al Barça, independientemente de que él sea o no el autor de los goles. Cierto es que el charrúa dispuso de alguna ocasión clara para ver portería, pero no estuvo acertado en la definición. En la primera mitad protagonizó un disparo que se le marchó alto, y también un contragolpe que podría haber resuelto con un disparo, pero que en vez de ello desperdició con un mal pase a uno de sus compañeros.

En el segundo tiempo, además de provocar la jugada del gol de la victoria, falló un un disparo que cruzó demasiado, marchándose el balón por la línea de fondo en vez de colarse en la portería. Lo más importante para el Barça es que Luis Suárez estuvo muy activo en todo momento, recuperando balones en la presión y generando espacios para que pudieran ser ocupados por sus compañeros.

Luis Suárez siempre suda la camiseta

No estuvo tan fino como en otros partidos en la definición ni en la combinación con sus compañeros, pero a pesar de ello resultó vital para el triunfo del FC Barcelona en tierras checas. Valverde agotó los cambios con Dembélé, Rakitic y Arturo Vidal, por lo que el delantero charrúa jugó los noventa minutos y no recibió descanso, teniendo en cuenta que este fin de semana el Barça no jugará el Clásico.

Tanto Suárez como los demás pesos pesados del Barça que acumulan más minutos aprovecharán durante los próximos días, hasta el martes, para recargar pilas. Después llegará el partido contra el Valladolid en el Camp Nou, en el que podría aparecer nuevamente el once de gala. Y ante los pucelanos, seguro, el '9' azulgrana volverá a tener un papel importante.