El FC Barcelona se ganó la lotería con Pedri González y Ansu Fati, dos jugadores que, a pesar de su corta edad, han demostrado que pueden convertirse en grandes referentes del equipo y llenar el espacio de Lionel Messi, en caso de que el astro argentino decida no continuar en el equipo. Ambos han asumido la responsabilidad que conlleva vestir la camiseta blaugrana y son la esperanza del barcelonismo, a corto y largo plazo. 

Pedri y Ansu apenas han alcanzado la mayoría de edad y ya tienen el cartel de ídolos del FC Barcelona, sobre todo en una temporada en el que la imagen del equipo ha sido muy irregular. Por encima de muchos jugadores veteranos y 'consagrados', se han convertido en futbolistas claves en el planteamiento de Ronald Koeman. 

Ansu Fati, antes de lesionarse, se convirtió en el salvador de los culés y en el gran responsable de muchos de los goles del equipo en el comienzo de campaña. En la temporada pasada, cuando debutó, maravilló a media Europa y dejó claro que su intención era pisar fuerte en la historia del FC Barcelona. Y vaya que lo ha conseguido en poco más de un año en el primer equipo. 

Comenzando con que debutó con 16 años, 9 meses y 25 días, convirtiéndose en el segundo jugador más joven en disputar un partido con el primer equipo azulgrana, por detrás de Vicenç Martínez y superando nada más y nada menos que a Lionel Messi, quien vistió la elástica culé por primera vez con 17 años, 3 meses y 22 días. Además, con 16 años y 304 días se convirtió en el goleador más joven del FC Barcelona en LaLiga, tras anotarle al Osasuna, superando así a Bojan Krkic (17 años y 53 días) y -en ese momento- a Leo Messi (17 años y 331 días).

En su primera temporada como culé, disputó 24 partidos en Liga, 5 en la Champions League y 3 en la Copa del Rey, con un total de cinco goles. En la máxima competición a nivel de clubes, Ansu Fati también hizo historia y grabó su nombre en lo más alto de los libros de historia del torneo continental al convertirse en el futbolista más joven en anotar, con 17 años y 40 días, superando así a Peter Ofori-Quayi, quien marcó en 1997 con el Olympiacos al Rosenborg, con 17 años, seis meses y siete días.

Pedri y su aterrizaje perfecto en el Camp Nou

El comienzo de Pedri González como jugador del FC Barcelona ha sido insuperable. Aunque, a diferencia de Ansu Fati y Leo Messi, no se destaca por sus cifras goleadoras, el canario también ha pisado fuerte en su llegada al Camp Nou. Hay muy pocos jugadores que llegan al Barça a muy temprana edad, sin ser parte de La Masía, y se convierten en referentes del equipo y, sin duda alguna, Pedri es uno de ellos. 

Ha sabido cómo romper todos los esquemas y convertirse en un jugador clave para el cuadro azulgrana en esta temporada. Se volvió en el mejor socio de Messi en el campo y uno de los causantes de que el argentino recupere su mejor versión y la sonrisa en el campo. El canario puede sentirse orgulloso de que, además de ser el compañero ideal de 'La Pulga' en el terreno de juego, también lo ha superado en récords, después de convertirse en el tercer jugador más joven en marcar con el club, con 17 años y 330 años, dejando en la cuarta posición al astro rosarino. 

El crecimiento de Pedri, al igual que el de Ansu, ha sido inesperado pero satisfactorio para todo el barcelonismo, que los ven como la generación de relevo cuando Messi abandone el club o cuelgue las botas. La presión y responsabilidad es enorme, pero han demostrado tener compromiso con la camiseta que defienden y, más importante aún, ganas de llevar al Barça a lo más alto.