Pedri es un escándalo y ya esto no es un titular o frase, es una realidad. Cada partido el joven mediocampista del FC Barcelona deja pincelazos impropios de su edad y meritorios de crack, estrella y veterano del fútbol, a pesar de ser un naciente jugador de élite o al menos, que juega en la élite.
Pero sigue estando pendiente el gol. Porque el fútbol va de eso, al margen de estilos, romances y gustos, poco cuenta la excesiva tenencia que han demostrado los culés esta temporada cuando la falta de gol los castiga como contra el Cádiz y el Granada. Pedri todavía tiene ese detalle por mejorar.
Nadie espera que sea un goleador ni mucho menos, ya demostraron Xavi e Iniesta que sin hacerlos estaban en el top del mundo, aunque también los hacían y muchos de esos goles con bastante importancia además. Por ahora, ganas e interés tiene, además del talento necesario para mejorar lo que sea necesario.
Desde el seis de enero no marca un gol y es cierto que al comienzo de la temporada apareció en momentos importantes de cara al arco, pero a medida que fue carburando la plantilla, se dejó en el camino lo que se proyectaba y comenzó a ser puntual su implicación en otras labores, también importantes.
Partidos como el que se jugó ante el Valencia, muestran que Pedri no es esquivo al gol, sino a la suerte y la puntería, porque cada juego deja jugadas de peligro en las que golpea el balón con más fuerza de lo necesario, a pocos centímetros del poste y muchos pequeños detalles que de acomodarlos, podrá ser un mediocampista de al menos 10 goles por campaña.
El que más juega
Pedri ya superó los 30 partidos jugados esta temporada entre la Liga, Copa y Champions, lo que le convierte en el sub 20 con más juegos en toda Europa, una competencia en la que va cabeza a cabeza con Camavinga, francés del Rennes que podría llegar a España tras los insistentes rumores que lo colocan en el Real Madrid.