Dembélé ha desconectado del mundo, al menos en lo que respecta a las redes sociales. Hace semanas que no realiza publicaciones en Twitter ni en Instagram, más allá de algún 'story' compartido recientemente, en el que recordaba a uno de los raperos más famosos del mundo como es Tupac.

Pero Dembélé está pasando gran parte del confinamiento en silencio mediático, algo que puede atribuirse a un carácter tímido y retraído que se ha exagerado con la reclusión en el domicilio propio. Mientras varios de sus compañeros publican casi a diario sus 'aventuras' del día, ya sean anécdotas, sesiones de entrenamiento o alguno de esos retos virales que corren como la pólvora, Dembélé se mantiene al margen.

El joven jugador francés sigue en contacto continuo con el 'staff' técnico y también con algunos de sus compañeros de equipo, tanto del FC Barcelona como de la selección de Francia. Aprovecha para jugar a videojuegos, una de sus grandes pasiones, y también para seguir el proceso de recuperación de su lesión, que no le permitirá reaparecer como mínimo hasta el mes de agosto.

En este sentido, el extremo galo se lo toma con calma. Sabe que aún se desconoce cuándo se reiniciarán las competiciones, y vive con la esperanza de que se alarguen LaLiga y la Champions League para, así, poder disponer aún de minutos esta misma temporada 2019-20.

Dembélé hace caso omiso a los rumores

Tiene claro también que, pese a los rumores que se oyen de manera intermitente en la prensa internacional, su voluntad es seguir en el FC Barcelona y no hacer las maletas rumbo a ningún otro equipo. Está a gusto en el Barcelona, y cree que si consigue fortalecer su físico y en especial las zonas más mermadas por las lesiones, acabará explotando y ofreciendo un gran rendimiento.

En su mano está convencer a una afición que sigue dividida en lo que a su futuro se refiere, con cada vez más barcelonistas colocándole en trueques imposibles para que lleguen Neymar Jr, Lautaro Martínez u otros delanteros. Pese a las especulaciones, Dembélé mantiene la calma y confía en sus posibilidades. Ahora, más que nunca, debe guardar silencio para hablar en el campo. Cuando llegue el momento...