Saltan chispas: División en el fútbol español sobre la vuelta de LaLiga

Si alguien hubiese apostado al principio de la temporada 2019-20 que ahora mismo nos encontraríamos en esta situación, se habría hecho de oro. La pandemia del coronavirus ha parado el deporte en todo el mundo, y las grandes ligas de fútbol empiezan a sufrir graves consecuencias. En Francia la Ligue ya ha sido cancelada con el PSG como campeón, siguiendo el camino iniciado por la Eredivisie de Holanda.

Por ahora la Premier League, la Serie A, la Bundesliga y LaLiga Santander tienen planeado reanudarse durante el mes de junio, pero a día de hoy todo es incertidumbre y los únicos plazos los marca progresivamente el avance (o retroceso) de la enfermedad. De ahí que haya división entre todos los estamentos futbolísticos, al menos en España, sobre si debería reanudarse o suspenderse definitivamente la competición.

La AFE ya ha transmitido a la Real Federación Española de Fútbol y a la patronal de clubes la preocupación de los jugadores, muchos de los cuáles opinan que no deberían retomarse los entrenamientos y partidos de forma tan temprana. Jugadores como Gabriel Paulista (Valencia) o Fali (Cádiz) ya se han mostrado claramente en contra de volver a jugar, al menos por ahora. "Juguemos cuando nadie lo haga con miedo. No quiero que por presiones económicas pueda morir alguien", propuso el central brasileño del conjunto ché.

"No quiero que por presiones económicas pueda morir alguien"

En cuanto al defensor del Cádiz, se ha negado incluso a regresar a los entrenamientos a corto plazo porque considera que hay "unas personas que me quieren intentar obligar a jugar al fútbol cuando no es un trabajo esencial". "Si hay el mínimo riesgo" de contagio, asegura el ex defensa del Barça B, no se vestirá de corto a pesar de tener contrato vigente.

En el bando contrario encontramos a jugadores que, como Ivan Rakitic, desean volver a jugar cuanto antes. "Yo quiero jugar. Es evidente que debemos intentar volver con las mayores garantías sanitarias, pero también debemos saber que nunca van a ser al 100%. Pero ese mismo riesgo lo van a tener todos los trabajadores en su vuelta al trabajo. Los empleados de un supermercados también se cambian en vestuarios y tienen las mismas posibilidades o más de contagiarse que nosotros. Ellos asumen ese riesgo y yo también quiero asumirlo", ha explicado el croata en una entrevista concedida a 'Marca'.

Incluso en los despachos hay discrepancias, dudas y alguna que otra disputa verbal. Ya de sobras conocida por todos es la antipatía que se desprende entre los presidentes de la RFEF y LaLiga, Luis Rubiales y Javier Tebas. El segundo quiere que LaLiga regrese cuanto antes, y sigue convencido de que podrá reanudarse con todas las garantías sanitarias (o gran parte de ellas). En cuanto al máximo mandatario de la RFEF, tiene sus dudas de que sea viable y no cree que sea bueno para los futbolistas jugar tantos partidos en tan poco tiempo. "Jugar al fútbol cada 48 horas es inhumano", comentó recientemente.

Más riesgo de lesiones

Porque esa es otra. Cuando el fútbol se reanude, si es que finalmente lo hace, los futbolistas habrán necesitado un mínimo de tres semanas entrenando al máximo nivel para recuperar la forma física. Incluso de esta forma, además, es probable que aumenten exponencialmente las lesiones por la intensidad del juego, unida al hecho de que los técnicos alinearán casi siempre a sus mejores jugadores al tratarse de las jornadas decisivas del campeonato.

Quique Setién también se mostró dubitativo sobre el regreso de LaLiga de aquí a unas semanas, confesando que no cree que sea posible hacerlo con todas las garantías. Y en el fútbol internacional, empezamos a conocer casos de jugadores que están confinados en sus países natales, en el extranjero, y por ahora se niegan a regresar a la disciplina de sus respectivos equipos para retomar los entrenamientos. Podría ser el caso de Cristiano Ronaldo, tal y como ha anunciado 'Il Corriere dello Sport' en las últimas horas.

Nada es seguro y todo es posible

En definitiva, nos encontramos en una situación en la que todo está en el aire. El FC Barcelona desea tener la seguridad de que tanto sus jugadores como sus empleados estarán a salvo de la enfermedad si regresan al trabajo. Y de lo contrario, es posible que el club también se niegue a volver a jugar. En ese caso hipotético, según anunció Javier Tebas, habría consecuencias deportivas para la entidad catalana. La realidad es que, al no ser el fútbol algo prioritario o esencial en estos momentos de crisis... a casi nadie le importa.