Hace meses, el FC Barcelona decidió 'bloquear' el fichaje de Gustavo Maia pagando un millón de euros al Sao Paulo en concepto de paga y señal. Con dicho pago, los culés se aseguraban que el club paulista no vendiese al joven delantero de 19 años, aunque finalmente se han tenido que abonar 3,5 millones de euros más para que la incorporación del brasileño pueda cerrarse.
En total, el FC Barcelona ha pagado 4,5 millones de euros al Sao Paulo por el 70 por ciento de los derechos de Gustavo Maia, algo que significa que si en un futuro el club catalán decide vender al extremo, tendrá que abonar dicho porcentaje a su club de procedencia. No obstante, desde el Camp Nou se confía en las posibilidades del joven atacante y se tiene muy claro cuál será la estrategia a seguir con él.
La prioridad del FC Barcelona será que Gustavo Maia se incorpore al filial, que actualmente está dirigido por Francisco Javier García Pimienta. La estrategia es similar a la que se siguió con otros fichajes jóvenes como Ronald Araújo o Ludovit Reis, aunque en el caso del extremo brasileño tendrá un condicionante claro: que el FC Barcelona B consiga ascender a Segunda División A.
Según las informaciones publicadas por el 'Mundo Deportivo', si el filial del FC Barcelona no consigue el ascenso a la categoría de plata del fútbol español, el club catalán le buscaría a Gustavo Maia una cesión, preferiblemente en un equipo de Primera División. Algo que precisamente ya se hizo el pasado mes de enero, cuando se fichó a Matheus Fernandes y acto seguido se cedió al Real Valladolid.
Gustavo Maia, un jugador de gran futuro
Gustavo Maia tiene 19 años pero ya ha demostrado que es un futbolista que puede dar mucho en el futuro. Se trata de un extremo que suele jugar pegado a la banda izquierda pero que tiene facilidad para tirar diagonales hacia el centro para acabar buscando el golpeo con la pierna derecha. De hecho, el tiro desde la media distancia es una de las grandes virtudes que le han hecho destacar en Brasil.
Estamos hablando también de un futbolista de gran polivalencia, que no solamente puede jugar en el costado izquierdo, sino también en el derecho e incluso por el centro. Su velocidad y capacidad de desborde pueden seguir mejorando en el filial del FC Barcelona, aunque eso solo será si los culés alcanzan el ascenso. Para ello, contarán con Ansu Fati y Riqui Puig como refuerzos estelares.